Manipulados

Uno de los grandes problemas al encarar el análisis del tema Illuminati (además de las seudo conspiraciones) es que se parte de pre conceptos ideológicos. Desde los fundamentalistas de creencias religiosas para quienes los Illuminati están detrás de «los otros», hasta el razonamiento simplón, lineal y maniqueo, por ejemplo, de quienes naturalizan ver a los mismos detrás de neoliberales, capitalistas, USA,. Vaticano… (todo tan previsible que hasta por ello debería despertar sospechas, lo que no quita que también sea cierto, pues pocas cosas son más peligrosas que medias verdades) y nunca se preguntaron si los populismos, detrás de consignas emocionales y adolescentes y un eficiente manejo de la simbología que impacta fuerte en la sensibilidad de masas no educadas y las dádivas siempre limitadas que acostumbran a la pobreza controlada, pudieran ser la máscara perfecta para los Poderes en las Sombras.

Cuando los defensores de teorías conspirativas, los aparentes «esclarecidos» que denuncian la Matrix, el Sistema, las Manipulaciones son finalmente devotos de ideologías populistas, cuando el aparato de propaganda seudo progresista convence a unos cuantos que los símbolos son más importantes que los hechos, cuando se «piensa» que un eslogan o una pancarta «es» el cambio, cuando algunos dicen «nosotros el pueblo» como si todos los demás fueran mefistofélicos agentes de potencias extranjeras u obnubilados insensibles, cuando sigues un hilo en Twitter con el hastag #LaVerdadEstaDeNuestroLado, sí, es cuando comprobamos con frialdad que las manipulaciones funcionan.