Lo que van a leer a continuación puede ser llamado, por algunos, simple especulación. Y quizás lo sea, pero creo firmemente que no. Y como lo creo firmemente, podría –entonces- abroquelarme en el argumento que como es una “creencia” personal no me es necesario probarlo. Sin embargo, si así hiciera iría flagrantemente a contrapelo de mi historial como investigador, de manera que lo fundamentaré, principalmente, diciendo que es la decantación de varios años de observación y reflexión sobre semiplenas pruebas.
A pocos se les escapará que desde los años de la década del ’50 del siglo pasado, los Estados Unidos han llevado adelante –así como Rusia, China y varios otros países- proyectos holgados de recursos humanos y financieros en busca de desarrollar sistemas de manipulación mental de la humanidad. El MK Ultra es, quizás, el ejemplo más conocido, y si nos es hoy tan conocido es porque, por definición, debe haber muchos otros aún absolutamente reservados. Evidencias tangenciales son, por caso, el relato del psiquiatra Mansur Escudero, afectado a la asistencia de las víctimas de la invasión soviética a Afaganistán, quien dice: “Era una inmensa extensión de tiendas de campaña, algo increíble, y en las peores condiciones que uno se pueda imaginar. No he visto nada parecido en mi vida. El agua potable era agua estancada. Aquella gente había huido de la guerra de su país y no tenían nada. Los hombres se inscribían en una improvisada oficina a la espera de que les entregaran un arma con la que volver a Afganistán para defenderlo de la invasión soviética. Las mujeres, los niños y las personas mayores se lamentaban en el recuerdo de los horrores que les había tocado padecer. Nos contaban que les habían arrasado aldeas enteras, que les habían envenenado los pozos, que habían presenciado violaciones masivas, que habían utilizado contra ellos napalm y que desde aviones les martillaban con ondas psicotrónicas…”
O bien esta presentación del mexicano José Octavio López Presa, que me exime de mayores comentarios:
Mojmir Babacek, autor checo conocido por sus investigaciones sobre armas psicotrónicas y fundador del Movimiento Internacional Contra la Manipulación del Sistema Nervioso Central, ha señalado que desde 1920 empezaron a investigarse fenómenos como la telepatía, la telequinesis y la clarividencia, y durante los 60 y 70 había una verdadera carrera armamentista entre Rusia y EE.UU. en esta área. Por otro lado, Un supuesto estudio realizado durante la Guerra Fría por el ejército estadounidense sobre los «factores que pueden influenciar la vitalidad y actuación de los artilleros», define a la psicotrónica como la proyección o transmisión de energía mediante disciplina y control mental individual o colectivo, o bien a través de un dispositivo emisor, una especie de perturbador mental. El informe añade que “la URSS parece haber hecho logros significativos en el desarrollo de armas psicotrónicas que pueden afectar seriamente la capacidad combativa”.
Una simple búsqueda en la Web permitirá que el lector se reúna con todas las pruebas –si confiables, más o menos, depende del criterio de cada uno- para dar sustento a lo que expondré a continuación.
Por lo pronto, quiero llamar su atención sobre un doloroso factor que parece de naturaleza creciente: la violencia sádica e inmoral que campea en el terrorismo. No remitiré (necesariamente) este comentario al actualmente archipublicitado ISIS porque –tal como he desarrollado en un podcast de “Al Filo de la Realidad”– hay sospechas fundadas que algunas de las “ejecuciones ejemplares” en realidad podrían tratarse de teatralizaciones mediáticas hábilmente orquestadas. Pienso, más bien, en el reciente ataque talibán a una escuela con más de ciento cuarenta y ocho muertos, de ellos, ciento treinta y dos, niños.
Sería simplista y un mero reduccionismo ante esta barbarie hablar meramente de “fanatismo”. Porque –aunque lo fuera- la pregunta seguiría siendo la misma: ¿cuál es la génesis de ese fanatismo?. Se hablará de “lavado de cerebro”, de “condicionamientos” desde la niñez, y tal vez se esté en lo cierto. La pregunta –otra vez- sigue siendo la misma: ¿cómo se genera ese condicionamiento?. ¿Es meramente una sucesión inacabable a través de los años de lecturas obligadas, discursos, privaciones sensoriales?. ¿O hay algo más?.
Si bien el ser humano es producto de su entorno y circunstancia y los conceptos de “bien» y “mal” son moralmente relativos, estoy convencido que en la “íntima convicción del ser” hay una clara distinción entre lo que está avenido a lo moralmente correcto y lo que no. Insisto: puedo comprender –jamás justificar- que algunos maten pensando en un supuesto bien mayor. Pero la masacre de centenares de indefensos, no como producto de una bomba o misil disparado a la distancia –cuya despersonalización del crimen respecto de quien aprieta el botón puede hacerle indifererente a la consecuencia de su acto- sino la ejecución fría y cara a cara de menores de pocos años implica una absoluta violación de las leyes de la propia biología, donde la muerte de una cría sólo se explica por la necesidad de supervivencia alimenticia pero que –en la Naturaleza- sobra en ejemplos de crías de otras camadas amparadas por hembras, en ocasiones, hasta de diferentes especies.
No se me diga aquí que esto “es una muestra de la maldad humana” porque ni usted ni yo, querido lector, por más comprometidos que estemos con nuestros ideales, haríamos eso. Por lo tanto, sabemos que hay una “humanidad” proactiva, moral, evolutiva, solidaria. Que a individuos quizás predispuestos (cultural o religiosamente) se les lleve ese “paso más allá” para realizar tamaña carnicería sin hesitar habla, más que de inmoralidad, de su verdadero nivel espiritual.
No, no caeré en tentaciones demonológicas. Pero no puedo negarme a mí mismo preguntarme si no hay, claramente, una manipulación conciente desde algún poder en las sombras del egrégoro colectivo de esa gente. Se crea o no en ello, la Magia existe, los grandes teurgos –blancos o negros- han jalonado la historia humana y sería hora de
preguntarse si, así como Estados Unidos, Rusia y otros estuvieron tan afanosos en llevarse secretos científicos nazis tras la caída de Berlín (sin ir más lejos, la Operación Sujetapapeles) qué destino habrán tenido investigaciones y archivos de la Ahnenerbe, la Sociedad Vril, la Sociedad Thule, la»Bund für Gotteserkenntnis» (“Sociedad para el conocimiento de Dios”, que sigue existiendo hoy en día) y tantas otras agrupaciones esotéricas bajo la égida hitleriana. Ésta es la Posibilidad Uno.
Y la Posibilidad Dos: que se programe psicotrónicamente a esas masas de “pre-fanáticos” para empujarles a cometer atrocidades (que, quizás, en estado de albedrío a ellos mismos les repugnaría) tan execrables para la opinión pública que cualquier accionar posterior por parte de los estamentos “civilizados” quede, entonces, plenamente justificado.
Hola Gustavo,
sinceramente creo que algo de esto hay.Siempre que ocurren estas cosas y uno tiene la oportunidad de ver en tv el rostro de estos individuos,parecieran perdidos,perturbados mentalmente,y luego escuchar a vecinos decir de la «aparente normalidad de sus vidas»,de no comprender que les ocurrió,siempre me hizo ruido.
Hay demasiada maldad en el mundo,al menos se nos muestra mucha mas que bondad en los «medios»,pero quiero creer,y eso me mantiene con,como decirlo,»vida espiritual»?,esperanza?,no sé,que hay otra mitad equilibrando de «bien»,»bondad»,seres de luz que nos tratan de proteger y guerrean con estos otros,solo que no se nos muestra…quizá utópico,pero sinó,que sentido tiene todo esto.O estaremos programados de niños a ser «buenudos»,creyendo que es lo correcto,y la verdad detrás es que esto es la ley de la selva,y que no existe bueno o malo??? duele pensar así,será porque así lo quieren quienes nos metieron en esta Matrix???
Gracias por todo y un abrazo!
Soy joven aun (21 años) pero creo ya tener cierta experiencia en esta vida y de lo que me he estado dando cuenta poco a poco es que el escenario en el que vivimos, es decir, la sociedad, es maligna.
Yo elegí ver las cosas tal como son; sin ser positivo ni negativo, si no, siendo «realista» y críticamente frió al encarar al mundo.
Este mundo esta regido y construido por la maldad y nosotros vivimos en el.
Podemos elegir ser de los «malos» y estoy seguro de que nos ira bien en este mundo siendo de esa manera, o podemos elegir ser los buenos y confiar en la suerte y en la ¿»ilusión»? de que podemos hacer de este mundo un lugar mejor..
¿¿Sera que los MALOS se visten de BUENOS y los BUENOS se visten de MALOS??
…o sera que los buenos no existen y como comento fugazmente Gustavo en un podcast: «En este mundo hay malos muy malos, malos y no tan malos».
Saludos desde Argentina’
Otra cosa que también he reflexionado es que pareciera como si los «MALOS» y los «BUENOS» tuvieran sus propias intenciones en particular, independientes a las del ser humano. Me explico?
Quien sabe, talvez los «buenos» y los «malos» son el mismo enemigo.
Talvez deberíamos dejar de lado a esos que históricamente han sido los BUENOS y los MALOS y empezar a confiar en nosotros mismos y a «rezarnos» a nosotros mismos..
Creo que somos capaces de esto ultimo, pero estamos demasiado atrapados en la matrix jejeje…
¿¿Acaso sera que el «bien» y el «mal» luchan solo por poder??
Hay otros factores ademas de manipulación psicotronica. La Sharia y la venganza, son suficientes para fundamentar tal masacre en una escuela. Igualmente este tipo de guerrillas como los Talibanes recluta niños a los que proveen de armas. El caso de la niña suicida que detono una bomba en medio de un supermercado. Es decir esta clase de masacres han sido pan de cada día como estrategia de guerra o terrorismo. Es decir no me parece estrictamente paranormal o bajo una manipulación psicotronica. Creo que la manipulación psicotronica es algo muy sutil, tal que no se percata la población y su resultado se observa a largo plazo.
Reveladora información. Hablar sin miedo en estos días difíciles es encomiable. Te sigo a través de tus podcasts. ¡Gracias por enseñarnos tantas cosas!
Somos bipolares con alternacias,fuimos creados de tal forma y, como el cuerpo fisico se degrada asi tambien la sociedad humana esta enferma.Estamos con fiebre alta,preludio quizas de que o dejamos que esta nos cure pues tal es su funcion o que debamos recurrir al quizas ;antibioticos /guerras.Entiendo que sin ser pesimista ,que nos acercamos a esto ultimo y con consecuencias desvastadoras.A quienes crearon la ley de los mercados de libre comercio y mas ,se le acerca una sombra de tal magnitud que ,quizas no haya donde esconderse.Cuando los «intereses» de una potencia pretenden aplastar los de los demas ,vade retro …………y entiendo que no se van a tirar con porotos ,no esta vez.
http://guerrapsicotronicayestadoislamico.blogspot.com.es