¿EVIDENCIAS DE VIAJEROS EN EL TIEMPO?

Dominio propio de novelas y películas de ciencia ficción, la posibilidad de viajar en el tiempo ha sido un tópico desconsiderado por los científicos “serios” hasta tiempos muy recientes, en que, de forma un tanto tímida y estimulados por las reflexiones, más filosóficas que metodológicas de algunos referentes “mediáticos” del academicismo –como Stephen Hawking- se animaron progresivamente a especular sobre él. Una especulación que, empero, es muy sugestiva. De la “imposibilidad” expresada en textos y congresos hace veinte años, a la certeza experimental que –claro que solamente a nivel de partículas subatómicas- el mismo no sólo es posible: también es probable. Hoy en día, cualquier docente universitario les dirá que el viaje en el tiempo es “imposible”. En términos de la física clásica –es decir, esa física que nos rige a usted y a mí- y sólo ocurre en el esotérico campo de la física cuántica. Y hasta allí llevaría razón. Lo que no impide que uno recuerde, con cierto cinismo, que si la contundencia petulante de dos décadas atrás que lo postulaba como “imposible” en cualquier orden del universo puede mutar, hoy, a este relativismo de paradigmas, uno (yo) tiene todo el derecho a pensar que es posible que en otros veinte años peguemos un nuevo “salto cuántico” y se nos diga, como quien no quiere la cosa, que sí, que en ocasiones, aún en la “microfísica” nuestra de todos los días, puede ocurrir.

Pero hay un camino paralelo que lleva a reflexionar sobre este tema. Porque un ejercicio de humildad nos debería dictar que la “seguridad” que viajar en el tiempo es imposible, hoy, no garantiza que lo sea eternamente. ¡Cuántas veces la pedantería científica ha tenido que aceptar que lo que consideraba imposible en un siglo era la realidad cotidiana en otro!. Volar, vivir más de sesenta años, vehículos sin tracción a sangre, desintegración controlada de la materia…. Todo ello concurre, entonces, a otro planteo:
¿Y si encontráramos “pruebas” que demostraran que en algún momento alguien viajó en el tiempo?.
Eso, es lo que repasará la crónica de hoy.

Que, básicamente, podemos dividir en dos grupos. Uno, el de los “Ooparts”, llamados así por ser la contracción de las siglas en inglés “out of place artifacts” (“Artefactos fuera de lugar”), es decir, objetos manufacturados o de producción mecanizada hallados en estratos geológicos o históricos absolutamente ajenos a lo que se muestra. Se trata de uno de los grandes temas “malditos” de la ciencia, y se han tejido innumerables especulaciones sobre ellos, desde ser la huella de visitantes extraterrestres hasta, precisamente, objetos dejados o perdidos por viajeros en el Tiempo. En lo personal, adhiero absolutamente a esta segunda posibilidad. En cuanto a la primera, muchos de ellos son demasiado “humanos” en su hechura y funcionalidad: es difícil imaginar que visitantes extraterrestres que olviden un martillo (de usarlos) éste sería tan similar a los empleados por nuestra propia cultura. Superadas las evaluaciones correspondientes, las imágenes muestran los más significativos, algunos de ellos, inclusive, popularizados en largometrajes documentales o programas de TV especializados.

Pero hay un segundo grupo, que surge de la paciente revisión y observación de fotos antiguas. Personajes que por sus características, o por los elementos que emplean y se ven en las imágenes están, obviamente, “fuera de lugar”. Parecen estar usando teléfonos móviles –en tiempos en que los aparatosos equipos domiciliarios de “discar” o, más aún, pedir la llamada a la operadora, eran de por sí el último grito de la moda tecnológica, o acusando vestimentas fuera de época. Imágenes para la polémica, claro, susceptibles de ser interpretadas según la creencia previa del observador. Pero si generan polémica –sea cual fuere la conclusión final- es porque de por sí ameritan nuestra atención.

En el Museo Paleontológico de Moscú, el cráneo de un bisonte muestra un perfecto orificio circular, sólo posible con un balazo
En el Museo Paleontológico de Moscú, el cráneo de un bisonte muestra un perfecto orificio circular, sólo posible con un balazo
1948. Secuencia fotográfica d euna mujer, ¿hablando por un teléfono móvil?
1948. Secuencia fotográfica d euna mujer, ¿hablando por un teléfono móvil?
Martillo incrustado en roca de 100 millones de años de antigüedad
Martillo incrustado en roca de 100 millones de años de antigüedad
Gigantesca "lámpara eléctrica" en el templo egipcio de Dendera
Gigantesca «lámpara eléctrica» en el templo egipcio de Dendera
Más "lámparas eléctricas" en Dendera
Más «lámparas eléctricas» en Dendera
A la derecha, un joven con moderna vestimenta deportiva, en 1952
A la derecha, un joven con moderna vestimenta deportiva, en 1952
Huellas de calzado en barro solificado. Cincuenta millones de años de antigüedad.
Huellas de calzado en barro solificado. Cincuenta millones de años de antigüedad.
fotografía casual del "backstage" de una película de Charlie Chaplin, alguien pasa hablando ¿por celular?
fotografía casual del «backstage» de una película de Charlie Chaplin, alguien pasa hablando ¿por celular?
Engranajes mecánicos fosilizados en Kamchatka, Rusia. Doscientos millones de años. Museo de Historia Natural de Lille.
Engranajes mecánicos fosilizados en Kamchatka, Rusia. Doscientos millones de años. Museo de Historia Natural de Lille.
"Diplodocus", reptil jurásico en un templo en la India
«Diplodocus», reptil jurásico en un templo en la India
Tornillo en roca paleozoica, trescientos millones de años.
Tornillo en roca paleozoica, trescientos millones de años.

5 comentarios de “¿EVIDENCIAS DE VIAJEROS EN EL TIEMPO?

  1. Gilberto Rodriguez Dominguez dice:

    Hola amigos creo también que cabe la posibilidad de que una civilización mas antigua que la nuestra , que logro un desarrollo igual o superior al nuestro y que sucumbió ante un cataclismo el cual en conjunto al paso del tiempo borraron las evidencias de las mismas , claro que esta teoría no se aplica a todas las imágenes mostradas en este post,. Gracias.

  2. Alberto Sinza dice:

    “NO EXISTE RAZÓN ALGUNA PARA QUE ALGUIEN QUIERA UNA COMPUTADORA EN CASA.” – Ken Olson, presidente y fundador de Digital Equipment Corp (DEC), fábrica de ordenadores, argumentando contra el PC en 1977.

    “NO HAY PRÁCTICAMENTE NINGUNA POSIBILIDAD DE QUE LOS SATÉLITES EN EL ESPACIO SE UTILICEN PARA PROPORCIONAR UN MEJOR TELÉFONO, TELÉGRAFO, TELEVISIÓN, RADIO O SERVICIO DE COMUNICACIONES DENTRO DE LOS ESTADOS UNIDOS.” – T. Craven, Comisionado de la FCC, en 1961.

    “UN COHETE NUNCA PODRÁ SALIR DE LA ATMÓSFERA DE LA TIERRA”. – New York Times, 1936.

    “LAS MAQUINAS VOLADORAS MÁS PESADAS QUE EL AIRE SON IMPOSIBLES.” – Lord Kelvin, científico británico, presidente de la British Royal Society, 1895.

  3. Humberto Salazar dice:

    En relación con este tema, vale la pena considerar también, aquellos personajes que han aparecido abruptamente en algunas épocas o momentos de la historia, en varias ciudades, con vestimentas fuera de contexto o época, hablando otro idioma, diciendo que vienen de otra parte y lógicamente terminan en un manicomio porque son declarados dementes. Qué interesante sería hacer una investigación en ese sentido. Seguramente encontraremos verdaderos dementes, pero quizás… podíamos llevarnos sorpresas con otros.

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