Como ya es de público conocimiento (obviamente, en los estamentos interesadosa en esta temática) los días 1, 2 y 3 de mayo próximo pasado se llevó a cabo en Paraná, Entre Ríos, Argentina, el Congreso del título, organizado por la agrupación local IPEC (Instituto Planificador de Encuentros Cercanos) y coordinado por un servidor.
Para quienes recién tomen conocimiento, repasamos rápidamente expositores y temas presentados:
Daniel Postizzi (Buenos Aires), grupo CICOA, Analista Fotográfico, Conferencia: “ El Método Fotográfico en la Investigación Científica Ovni”
Adolfo Gandin Ocampo (Buenos Aires), Director UNIFA, Conferencia: “Ufologia Argentina , su investigacion del fenomeno OVNI y su reinsercion en el mundo, Presentacion de casos OVNI investigados por esta Asociacion dentro de la Republica Argentina, realizaremos un resumen gral y ampliaremos el caso MONTE GRANDE. Acciones realizadas por esta agrupacion a nivel mundial para reisertar a la ufologia Argentina al primer nivel investigativo”.
Claudio Rubén Calistro (Buenos Aires), Periodista. Contactado, Periodista- Escritor Contactado. Divulgador del Contacto y Mensaje Extraterrestre, Conferencia: “El camino hacia el Contacto”
Gustavo Fernández (Paraná), Director IPEC, escritor, conferencista de trayectoria internacional, Conferencia:
“Espiritualidad e Investigaciòn OVNI: ¿irreconciliables?”
Eduardo Grosso (Buenos Aires), Analista de “visitantes de dormitorio”, Conferencia: “Mutagénesis extraterrestre”
Dr. Luis Alberto Reinoso (Rosario, Santa Fe), Abogado, autor, investigador de campo, Conferencia: “De Funes a Roswell, desclasificaciòn de archivos, casuística y mutilaciones de ganado”
Oscar Raúl Mendoza (Santa Fe), Investigador de Campo, Conferencia: “50 años tras los OVNIs”.
Carlos Alberto Fernández (Uruguay), Terapeuta Integral, iniciado por Maestros ancestrales en distintos países del mundo, líder ded gurpos de meditaciòn., Conferencia: “El proceso de transformación en la Argentina y el apoyo de los Hermanos Mayores”
Andrea Pérez Simondini (Buenos Aires), Investigadora. Desclasificaciòn documentos oficiales. Fundadora e Integrante del Grupo de Investigación Visión Ovni. Co-fundadora del Museo del Ovni en la localidad de Victoria (Entre Ríos). Asesora externa de la reciente Comisión de Estudios de Fenómenos Aeroespaciales (CEFA), dependiente de la Fuerza Aérea Argentina. Conferencia: “CEFORA – Desclasificaciòn de los expedientes de Fenómenos Aeroespaciales”
Gabriela Serrano Clavero (Buenos Aires), Contactada, Docente, Coreuta. Estudiosa y Divulgadora del Contacto y Mensaje Crístico Extraterrestre. Conferencia: “Todos somos extraterrestres”.
A partir de aquí, uno (yo) podría abundar en lugares comunes y previsibles que de todos modos serían ciertos:
Escribir sobre la entusiasta concurrencia de público, el alto nivel de las conferencias presentadas, el seguimiento que la prensa hizo de esas presentaciones. Extenderme en el alto grado de interacciòn entre conferencistas y asistentes y, extrapolando a las dos Reuniones Plenarias celebradas a puertas cerradas los días sábado y domingo, hacer hincapié en las jugosas pláticas, el enriquecedor intercambio de información y metodologías, historias y vivencias personales, la riqueza de puntos de vista presentados.
Y, como dije, todo ello sería rigurosamente correcto.
Pero si sólo a ello se limitara, tarde o temprano, seguramente más temprano que tarde, este Congreso sería indistinguible de los demás, realizados, en profusiòn y calidad variable, con anterioridad. Por ello, voy a extenderme en el aspecto donde, sí, estoy seguro que este evento marcará un antes y después.
Lo humano. Y esto no es una mera petición de principios.
Podríamos comenzar por lo que –con cierta indiscutible lógica- debería ser el final de esta nota. El “Manifiesto Paraná”, un documento refrendado por todos los conferencistas mencionados. Muchos otros eventos similares han presentado, también, documentos al finalizar los mismos. dirigidos a las fuerzas vivas de la sociedad, el Estado, los ámbitos académicos. Incentivando metodologías comunes y actualizaciones tecnológicas. Todo eso, qué duda cabe, es muy importante. Pero la diferencia que hace este evento es su hincapié en lo HUMANO. Aunque sigamos pensando diferente, pudimos mirarnos a los ojos, compartir, respetar y respetarnos, confraternizar. Y haré especial énfasis en algo donde, tras casi cuarenta años de dedicarme a este tema, descubro una maravilla: primera vez que veo un congreso donde todos se sentaron a escuchar las conferencias de todos. Y el Manifiesto debía inevitablemente estar asociado con esa tónica.
Seguramente alguien dirá que ese aspecto humano no nos dirá la verdad tras los OVNI. Que para ello hay que investigar el fenómeno. Cierto, pero no olvidemos que quienes investigamos, quienes empleamos esas metodologías y aparatología, somos humanos. Y esa diferencia que hizo este Congreso, donde todos y cualquiera tenía el mismo espacio (cosa que honraron sobremanera todos los conferencistas, con un nivel de cualidades humanas maravilloso) es la gran asignatura pendiente de la Ovnilogía argentina. Y aquí lo hemos logrado.
Sabíamos que en este Congreso (al que, obsérvese, no le pusimos numeración, precisamente como un guiño simbólico de reconocimiento a todos y cada uno organizaron congreso previamente en nuestro país) confluirían dos “escuelas de pensamiento ovnilógico” que, a riesgo de ser reduccionistas, habíamos bautizado como “dura” y “contactista”. Pudimos, diplomáticamente, haber reducido el riesgo de roces y conflictos, limitándonos a coordinar –como tantos han hecho- una serie de conferencias a las que llamar en bloque “congreso”.
Pero sabemos que un Congreso no merece llamarse así si no tiene carácter deliberativo. De modo que allí estuvieron, entonces, esas dos Reuniones Plenarias a las que hacía referencia donde, por un colectivo de razones, sabíamos campo propicio para potenciales disputas y enfrentamientos. Y no solamente no las hubo sino que todos, de manera monolítica, participaron con un respeto, hidalguía y dignidad que aún me emociona recordar. Y aún más allá: observar “duros” y “contactistas” reírse de bromas comunes, caminar abrazados por estas callecitas de Paraná, escuchar sus carcajadas a toda hora en el hotel donde se les concentró, nos decía que sí, que era posible y que, siempre, apostar a las personas es bueno.
Atrás quedaron los pobres de espíritu, aquellos que ignoraron o miraron de soslayo y con suficiencia este esfuerzo por considerar que no estaba “a la altura” de sus conocimientos. Mezquinos de intelecto que, con su propio silencio, quedaron descolocados porque, ¿saben qué? Seguiremos disintiendo, debatiendo con pasiòn (¿puede haber una Ovnilogía desapasionada?) nuestros abordajes respectivos pero nos hemos mirado a los ojos y hemos descubierto que la “otredad”, en Ufología como en tantos otros ámbitos de la vida, en puridad nos enriquece. Y todos los que estuvimos allí, conferencistas y público, lo vivimos. Los otros, simplemente, se lo perdieron.
Finalmente, agradecer a los verdaderos merecedores del aplauso: los miembros del público. Algunos, llegados desde las provincias de Santa Cruz, Chubut y Mendoza. Dos días de viaje para estar aquí. Y al despedirse, en sus abrazos cálidos y sonrisas supimos que hicimos bien la tarea.