“El propósito de los extraterrestres es religioso”
Ray Nielsen
Presidente de “Aetherius”, veterana sociedad inglesa de contactismo
Debo admitir que la razón que me llevó a escribir este artículo fue una pregunta que, casi inopinadamente, se apareció en mi conciencia mientras reflexionaba sobre el problema de los “contactados” (es claro que así me estoy refiriendo más a quienes tienen –o dicen tener- vínculos metafísicos y telepáticos que a protagonistas de “encuentros cercanos de tercer tipo”) y las “revelaciones” –monstruosamente bibliográficas- de fuentes tan inasibles como esos mismos citados mensajes. Porque mientras me interrogaba sobre el porqué de su “inmaterialidad” testimonial, su ambigüedad discursiva, su feérica dependencia de los dichos y no de los hechos, sospeché que todo ello podría tener otra explicación que no fuera la de alucinaciones, expresiones de deseos o parodias de ignorantes: ¿Y si el objeto de las revelaciones y las elusivas apariciones de contactos fuera preservar un libre albedrío (respecto de la toma de conciencia que implique modificaciones de posturas intelectuales que afecten lo espiritual) que de ser más evidente, por eso mismo no existiría?. Porque hay una lógica dentro de lo ilógico, una coherencia del absurdo: la documentación revelada mezcla verdades como puños, perlas de sabiduría, semi verdades, incisos absurdos, necedades, disparates sin sentido y grandes mentiras.
Estoy convencido que muchos canalizadores y contactados –no todos- contactan con algo. La pregunta es con qué.
Otra vez insisto con el concepto –que tal vez a esta altura aburra a mis lectores- de la necesidad imperiosa de cambios de paradigmas. De comprender que la evolución pudo haber seguido en otros planetas (o en otros planos de la Realidad) senderos absolutamente distintos. Cuando Arthur Clarke escribió aquello de: “una tecnología suficientemente avanzada lucirá como indistinguible de la magia” tal vez no estaba tan errado del camino que quiero proponer. Y que podría sintetizarse en la hipótesis de que la evolución tecnológica estrictamente material tiene un techo, pero como la intelectual y espiritual no, habrá de superar a aquella en algún momento.
Para ponerlo de otra manera: la evolución tecnológica pasará por diferentes fases, siendo la inmediata siguiente (extrapolando las tendencias actuales) la simbiosis entre lo biológico y lo electrónico-mecánico. Alguna vez escalará un peldaño, y la tecnología ya será psíquica-biológica. Y, dentro de milenios tal vez, el maridaje se dará entre lo espiritual y lo psíquico. No debe extrañarnos, entonces, que civilizaciones más avanzadas que nosotros en el futuro ya no cuenten con tecnología material por lo menos en el sentido en que nosotros las entendemos) sino la misma sea exclusivamente espiritual. Si la “técnica” es, según mi diccionario, “conjunto de procedimientos de que se sirve una ciencia o un arte”, “Habilidad para usar esos procedimientos” y “”Habilidad para hacer o conseguir algo”, es un hecho que puede perfectamente hablarse de “técnicas espirituales” con un fin en sí mismas.
La primera deducción que aplico a esta reflexión puedo plantearla entonces en forma de pregunta: ¿Por qué ha de despertarnos escepticismo que los “mensajes” de presuntos extraterrestres sean siempre tan “espiritualistas” si ése sería, precisamente, su ámbito de desenvolvimiento técnico?. Nosotros somos quienes estamos esperando que nos hablen de fórmulas, ecuaciones, tuercas y tornillos, porque ése es nuestro paradigma dominante. Y también: Si esas hipotéticas culturas desearan ayudarnos (no digo que así sea; sólo presento la especulación) ¿por qué ha de molestarnos que sólo se refieran a lo espiritual, si precisamente ésa es nuestra mayor carencia?. No quiero parecer un sofista, pero si alguien me replicara que lo que necesitamos y nos interesa es la cura para el cáncer, o la técnica de vuelo interestelar, sólo mostraríamos (a) nuestras carencias espirituales, y (b) que lo que nosotros creemos que necesitamos tal vez no sea lo que verdaderamente nos hace falta. Mi hijo de cinco años me exige lo que él cree que necesita: mi función como padre es darle lo que realmente (espero) precisa.
Se me acusará de ser demasiado “espiritual” en el enfoque ovnilógico. La inclusión de lo mágico brota de introducirnos en una Tecnología mística. De cualquier forma, la ovnilogía “científica” no ha progresado gran cosa, ya que avanzar hipótesis especulativas no confirmadas por un modelo experimental predecible por más que cuente con ropajes académicos es pura ilusión, como ilusión aparece la lectura mística. Es sugestivo que algunos científicos dedicados a la Ovnilogía (como Vallée, Hurtak o el propio Hynek al final de su vida) se inclinen hacia lo místico, mientras que técnicos o legos más papistas endiosen un “abordaje metodológico cuantitativo” y el uso de aparatología en un concierto lúdico que nos recuerda a los juegos tan “serios” de los pequeños que respetando más o menos lo formal, están vacíos de otro sentido que no sea el imitativo.
La discusión entre EBEs “espirituales” o “mecanicistas” puede resolverse así:
A medida que una civilización avanza, descubre que la garantía de supervivencia está dada por la anexión o interacción con lo espiritual. Como necesaria contraparte de la naturaleza física, sólo se evoluciona si el sistema está completo en sus partes. De lo contrario, desaparecen. Por ejemplo, una civilización solamente tecnológica sería dominada por su propia entropía en orden a la autodestrucción; o una solamente espiritual vería que su negantropía se ve superada por la entropía del medio. En consecuencia, lo espiritual equilibra negantrópicamente la entropía material.
En cien años solamente, hemos pasado del mecanicismo – positivismo al paradigma de la Nueva Era. Una civilización que avanza lo necesario para viajar por el Universo, debe haber integrado la variable espiritual. Pero cuidado; lo espiritual es una dimensión (con sus leyes, sus seres, sus jerarquías) y no solamente “lo bueno”, ya que existe una “buena espiritualidad” (¿Dios?) y una “mala espiritualidad” (¿Satán?). Yin y yang, complementarios y relativos.
Podemos pensar entonces en distintas culturas de EBEs con interacciones, contactos y manipulación de “lo espiritual” para sus fines. El manejo de acciones espirituales sobre nuestra pobre percepción de lo espiritual distorsiona la realidad OVNI.
Tal vez, entre las motivaciones de los EBES haya de todo, como entre los dirigentes de agrupaciones espiritualistas o religiosas: perturbados, fraudulentos, gente que usa medios espirituales para fines materiales, gente que usa medios materiales para fines espirituales, gente que realmente está sintonizada con jerarquías positivas, gente que realmente lo está con jerarquías negativas, gente que cree sinceramente en lo que hace como un fin en sí mismo y gente que cree sinceramente en lo que hace pero como un medio. Todos ellos pudieron haber elegido otras actividades pero, para bien o para mal, se desarrollan con una componente espiritual, como las empresas japonesas (por eso ambas van a seguir creciendo siempre).
Así, los EBEs pueden valerse de medios espirituales concomitantes con su tecnología, para ayuda (como misioneros), para expandirse (como pentecostales), para canalizar su negatividad (como la Orden del Templo Solar).
Sin embargo, no puedo evitar percibir un cierto tufillo, digamos, “fascistoide” en la forma en que se presentan estos mensajeros pretendidamente extraterrestres, con un giro particular propio de las épocas. Durante los ’50 a los ’80, existía una inobservada categorización entre el aspecto físico de los EBEs y sus intenciones: los “hermanos del cosmos”, portadores de reveladores mensajes, eran siempre estéticamente atractivos: altos, rubios, de ojos claros. En cambio, aquellos presuntos tripulantes de OVNIs con intenciones aviesas o en todo caso fríamente indiferentes a nuestras necesidades, eran pequeños cabezones, de piel aceitunada y, en el peor de los casos, oscuros enanos peludos. Empero, ya en los ’90 esta tendencia tiende a difuminarse y se reciben mensajes positivos de ambas “razas”. ¿Es que los segundos fueron conquistados por el Amor, o es apenas un reflejo de la cultura más versátilmente “light” de la década pasada?.
Otra de estas características estriba en el enfrentamiento entre facciones: casi todos los grupos de “contactados” están en conflicto entre sí: cada uno de ellos, como fanáticos neopentecostales, reivindica la veracidad de sus decires y sus mentores ante la falsía de los otros o, en este último caso –y no sé si para bien- se les atribuye inconfesados fines perversos.
Siempre, los ropajes de información son distintos, aunque el contenido es único:
– Los ángeles eran en realidad extraterrestres, o, en alguna excepción, ambos son aliados.
– El fin del mundo está cerca si no cambiamos.
– Jesús fue extraterrestre (físicamente o en espíritu)
– Existe la reencarnación
– También estuvieron vinculados a la Atlántida
– La vida después de la muerte continúa en otros planos.
– Existe una relación autoritaria detrás del mensaje: los amamos y les guiamos, pero no tienen posibilidad de salvación si no siguen nuestros consejos y sólo eso.
– Existe una confederación galáctica.
– Somos las “ovejas negras” de la Galaxia.
Si estudiamos el “camino del contacto”, observamos siempre esta secuencia:
– Se trata de una persona común, anónima hasta el momento de sus experiencias.
– Vive un episodio shockeante (encuentro OVNI, experiencia extracorporal o peritanática).
– Recepciona su primer mensaje
– Deviene la confirmación en los hechos: le es anunciada una aparición OVNI que realmente sucede, ocurre una catástrofe que le fue anticipada o, en un nivel más prosaico, acaece una situación personal en la forma en que le fue advertida.
– Comienza a recibir más mensajes.
– Forma el primer grupo de seguidores, entre sus allegados.
– Protagoniza, generalmente con este grupo, una segunda confirmación fáctica.
– Recibe mensajes apocalípticos.
– Institucionaliza su grupo: como religión, “grupo de difusión”, academia de enseñanza, etc.
– Esta etapa ocasiona pérdida de liderazgo o es seguido de un “aggiornamiento” u ocurren cismas.
– El grupo inicial radicaliza su postura.
– Adviene un Gran Final anunciado.
– Al no ocurrir, deviene una masiva decepción, con pérdida del grueso de fieles y desacreditación personal.
– Se construye una teoría autojustificativa, que hace cerrar filas en formas de autoprotección entre el grupo raíz.
– Pero, con el tiempo, éstos comienzan a disgregarse.
– El “contactado”, solo, decepcionado por el abandono de sus “Hermanos Mayores” que a esta altura generalmente ya no le contactan, sufre obsesiones compulsivas por recuperar el espacio perdido. Si no lo logra, deviene el suicidio (solo o en grupo), la reclusión, etc.
ALGUNOS LIBROS REVELADOS
AÑO TÍTULO PÁGINAS RECEPTOR FUENTE
1860 ETIDORPHA 452 Llevelyn Druy Seres de la
(Cincinatti) Tierra Hueca
1881 OHASPE 892 El dentista John Ángeles
Newbrough
(Nueva York)
1888 LA DOCTRINA 1571 Helena Blavatsky Maestros
SECRETA ascendidos
1912 REFLEXIÓN Y 1019 Benomi B.Gattel ?
DESTINO
1914 EL VERDADERO 1600 James E. Padgett
EVANGELIO RE-
VELADO DE NUEVO
POR JESÚS
1954 125 libros que suman 38.000 pág. Ernest y Ruth Arcángeles
en ad. Norman
1955 EL LIBRO DE 2097 William Sadler Extraterrest
URANTIA
1963 9 libros por 4.000 pág. Jane Roberts “Seth”
1973 CURSO SOBRE 1188 Prof. Helen Schuman ?
MILAGROS
1978 LOS MANUSCRITOS 1700 Grupo Aztlán Extraterrest.
DE GEENOM
La observación de esas clásicas características del “contactado” llevó a los sociólogos Jean Fastinger, Henry Riecken y Stephen Schaiter a formular la “Ley de las Profecías Fallidas”, confirmada tanto por los seguidores de Giorgio Bongiovanni tras su fracasada predicción del Tiempo Final en agosto de 1991, como la anunciada destrucción de Salt Lake City el 21 de diciembre de 1954.
Tras el fallo de la profecía, los “fuertes” radicalizan su postura, siendo sólo los “débiles” los que se dan cuenta de la inexactitud de los mensajes y deciden abandonar sus ideales. ¿Son víctimas aquellos, “contactados” de la burla de sus “guías”?. ¿O quizás es un mecanismo de autodestrucción que impide que lleguen a ser creídos más de lo debido?. ¿O es todo un teatro orquestado por no sabemos quien?.
Aquí es donde deberíamos detenernos y explorar otra vertiente sugestiva: la que afirma que tales “mensajes” son irradiados desde alguna “central de poder” bien terrestre. Con fines inconfesos, sociedades secretas o grupos de inteligencia militar podrían estar realizando masivos experimentos de “control mental” sobre la población (recordemos el nefasto MK – Ultra y su descubrimiento que microondas dirigidas podrían provocar alucinaciones auditivas y visuales). Siendo consciente del poder en las sombras de ciertas órdenes plutoesotéricas (si se me permite la expresión) no me extrañaría que esta variable tuviera más peso del que se le asigna, y se me ocurren varias posibilidades:
a) Servicios de inteligencia gubernamentales que desean crear la expectativa de visitantes cósmicos, ora benignos, ora malignos, para encontrar así apoyo popular en masivos gastos de armamentos ante un “enemigo” que, por no existir, no puede revelar la falacia de tal proposición.
b) Un grupo de élite económico que históricamente viene transmitiéndose de generación en generación el control del mundo (¿sabían ustedes que el 80 % de los recursos de Estados Unidos y Europa están en manos de sólo doscientas familias muchas de ellas emparentadas entre sí?. ¿Sabían que hasta antes de James Carter, de 37 presidentes norteamericanos 21 estaban emparentados?. ¿Qué hubo en la administración gubernamental de USA 17 Kennedy, 14 Tyler y 21 Cooledge?) y que necesita mantener ciertos paradigmas culturales para dirigir el criterio de las geopolíticas y el desenvolvimiento de las demandas mediáticas?.
c) Una sociedad espiritualista que de esa manera distrae de sí mismos la atención de los espíritus más esclarecidos.
d) Nazis y su organización, sobrevivientes de la Guerra Mundial –sabido el profundo interés de los hombres de la swástica por lo oculto- que desde las sombras preparan su advenimiento: los extraterrestres benévolos son demasiado “arios” para mi gusto.
Crear una “religión del ovni” tendría, para ciertos terrestres, beneficios claros: se dispondría de miles, decenas de miles de fanáticos latentes esparcidos por el orbe (lo cual tiene un peso político considerable), además de desacreditar a una ovnilogía seria. Pero, claro, también tendría beneficios para los extraterrestres, ya que les pondría su disposición una amplia y variopinta colección de cobayas disponibles, así como una quinta columna incondicional.
Tal vez una sensata forma de distinguir a “guías” creíbles de “guías” manipuladores y perversos sea, especialmente en los contactos iniciales, someterles a ciertas preguntas esclarecedoras. En lo personal, decidiría desconfiar de cualquier respuesta tipo “¡Hombre de poca fe!. ¿Porqué preguntáis (digo yo: ¿porqué siempre los “guías” hablan en castellano demodé?) y no aceptáis con humildad nuestra advertencia en este Final etc..etc…etc…?”
Una pregunta que formularía es, dado que suelen advertirnos que la destrucción de nuestro mundo (estallidos nucleares, catástrofe ecológica o lo que venga) perturbaría el orden cósmico, lo que preguntaría, digo, es cómo es eso posible. Día a día, sistemas enteros –que no sólo minúsculos planetas- entran en colisión, son devorados por agujeros negros, estrellas colapsan y estallan en novas o supernovas, y por muy apocalíptico que sea para sus vecindades, el resto del cosmos (nosotros, por ejemplo) no sólo no somos afectados sino que, de hecho y si no fuera por nuestros astrónomos –y periodistas- ni siquiera nos enteraríamos.
La epopeya del contacto tiene hitos contradictorios, bizarros y conflictivos. Como la aparición, el 7 de agosto de 1967, de un individuo en el Centro Médico San Bernardino (un centro de seriedad reconocida, al punto que se encarga de los análisis para el Cuerpo Técnico de la Policía Judicial), en la ciudad de Caracas, Venezuela. Pidiendo una entrevista con un clínico, al solicitársele sus referencias da un nombre casi ridículo: “Astrum”. La enfermera simplonamente interpreta que es un apellido (sin las obvias connotaciones cósmicas y lo deriva al gabinete del doctor J.L. Sánchez Vega quien, al hacerle un superficial chequeo general, comprueba cosas que le incomodan: un pulso increíblemente lento, una capacidad pulmonar exagerada, ojos casi noctilucentes. A lo cual, este caballero “Astrum” le dice que no se preocupe, que en realidad es un extraterrestre circunstancialmente en nuestro planeta (y que, tal vez por recomendación de su médico de cabecera extragaláctico, decidió no permitir que ese detalle de un paseíto por la Tierra impidiera su habitual control médico, seguramente). Para ratificar su exposición –y evitar ser derivado al consultorio psiquiátrico- levitó, ante los asombrados ojos del facultativo, un lápiz que éste poseía en su escritorio. Y después, simplemente, desapareció.
¿Es acaso creíble que un supuesto extraterrestre decidiera someterse a un chequeo médico con un profesional cualquiera para suspender la revisión en medio de la misma y anunciar lo obvio, desmaterializándose después?.
¿Es el caso real?, es lo primero que nos preguntaremos. Para simplificar los alcances de este trabajo, sólo diré que confío en las fuentes bibliográficas la mayoría, de donde he tomado la casuística que empleo a modo de ejemplo. El criterio de credibilidad está dado por un largo seguimiento de la misma y por los antecedentes de sus autores. Así que partiendo que el hecho realmente existió para el autor de estas reflexiones, sólo queda preguntarse el “para qué”. Un supuesto extraterrestre se cae en una consulta médica para terminar revelando lo obvio. Un médico responsable y oscuro de cuya traumática experiencia no depende una explosión mediática. Más allá de las transformaciones que en lo personal haya sufrido, el testimonio sigue las vías usuales: una denuncia policial que genera una discreta y escéptica investigación judicial la cual termina en una vía muerta; un ser humano conmocionado y un entorno afectado en grado diverso, donde el índice de impacto y verosimilitud decrece en la medida que nos dirigimos a la periferia de dicho entorno.
Sin embargo, es evidente que este lento proceso de concientización (si eso es lo que tienen en mente los hipotéticos extraterrestres) surte efecto: cada caso genera un patrón de consecuencias similares, pero la multitud de casos acaecidos me hace pensar en un calmo estanque de agua donde arrojamos un gran puñado de piedras: cada una generará su propio patrón de ondas circulares, pero todas irán afectando a las más inmediatas generando nuevos patrones que afectarán entonces a las más alejadas; a los segundos de arrojar las piedras, el estanque ya no está en calma, ni siquiera se observa un gran número de círculos abriéndose en distintos puntos. Ahora la totalidad de la superficie de la masa líquida se agita erráticamente con olas, encrespada.
¿Será este símil lo que la inteligencia rectora tras los OVNIs quiere provocar en nuestro Inconsciente Colectivo?.
Si de eso se trata, nada mejor que generar ondas “de choque” opuestas; a los contactos benevolentes le sucederían situaciones pavorosas, y viceversa. Como en un cósmico “koan” zen donde el maestro, después de revelar una verdad a su discípulo, hacérsela vivenciar y vivir conforme a ella, le dice jocosamente que no debió haberle creído (provocando un conflicto intelectual de tal naturaleza que sólo puede resolverse –si es que el discípulo está preparado- con una “disrupción de la conciencia”, un “golpe intuitivo”, una iluminación, en síntesis, la inteligencia detrás de los OVNIs nos somete a un doble juego de mentiras y verdades. El problema, quizás, es que nuestra naturaleza maniquea nos lleva a encajar tal dualidad no como producto del mismo fenómeno sino con orígenes distintos para satisfacer así nuestra necesidad del Bien versus el Mal. A los “venusinos” simpáticos de Adamski , a Ashtar Sheran y otros, le suceden los misteriosos “suicidios inducidos” de Tarrasa (España), donde el 20 de junio de 1972 José Rodríguez Montero, de 47 años, y Juan Turu Vallés, de 21, tras haber recibido un mensaje de sus “hermanos de las estrellas” apoyaron las cabezas sobre el riel del ferrocarril. O los dos jóvenes que con sus rostros cubiertos con máscaras de plomo y también anticipando haber recibido una invitación a pasear por el espacio, se suicidaron envenenándose el 20 de agosto de 1966, en el Morro do Vitem, Brasil, un caso con grandes repercusiones que extrañamente fue imitado por dos adolescentes exactamente en el mismo lugar en octubre de 1972. O los imitadores de los suicidas de Tarrasa, Francisco Saireo, de 16 años, y J.J. Gómez Vargas, de 18, que hicieron lo mismo por las mismas razones en cercanías de Lérida. O el llamado “caso Cáceres”, dos soldados españoles que se dispararon uno al otro, después de haber sido invitados por una “dama de blanco” (¡) que se les apareció durante su guardia nocturna, a visitar de ese modo otro planeta. Y por qué no recordar a la Orden del Templo Solar, o a Applewhite y su grupo “The Heaven’s Gate”.
Creo que más por reacción defensiva que por razonamiento veraz, aún quienes son acérrimos defensores de la realidad extraterrestre y sus contactos oponen, para estos tristes episodios, dos –y sólo dos- explicaciones: o bien las víctimas estaban irremediablemente perturbadas, o bien fueron seducidos por el “lado oscuro”, extraterrestres “negativos” empeñados en la perdición de los espíritus humanos. Claro que aplicando el mismo razonamiento, si dos personas que se suicidan por creer haber sido invitadas cósmicamente son alineados, ¿porqué no harían de serlo también todos los que reciben esos contactos espaciales?. El problema es que muchos “contactados”, tal vez una gran mayoría, no son más alineados que todos los demás habitantes del planeta (y, en ocasiones, aún más cuerdos, más morales, solidarios y sanos). Además, en algunos de los casos citados, cuando se contó con materiales suficientes como para elaborar perfiles psicológicos de las víctimas (como en el caso de Heanven’s Gate, donde tenemos a nuestra disposición desde el testimonio de familiares, videos antiguos y recientes, grabaciones, correspondencia y un largo etcétera) lo que más desconcierta a forenses, policías, investigadores de toda laya es que las víctimas no presentaban ninguno de los síntomas que habitualmente se adjudica a quienes son “programados” por las sectas. Eran personas sensibles, cultas, lógicas, que comprendían perfectamente la sucesión de eventos, estaban ubicados en tiempo y espacio, lamentaban el dolor que causarían a sus familiares y trataban de consolarles y explicarles en sus entrevistas pregrabadas el porqué. Mientras una y otra vez contemplaba las videoconferencias que ofrecieron antes de morir, sentí correr el frío por mi espalda: eran personas normales en situaciones anormales. Sabían lo que estaban por hacer y sus consecuencias. Y me he preguntado muchas veces (aunque ésta es la primera vez que lo admito públicamente): ¿Y si tenían razón?.
Esto es sólo una hipótesis de reflexión, ni siquiera de trabajo, y ante una sociedad hipócrita como la nuestra (aún entre muchos que se declaran fervientes partidarios de la espiritualidad) desconfío que mis razonamientos sean seguidos sin ser execrados de antemano. Pero como, ya saben, tengo la mala costumbre de pensar en voz alta, aquí va:
Aún las personas defensoras de la vida después de la muerte y quienes construyen toda una filosofía alrededor de la pervivencia del espíritu después de la transición y en otros planos, y (supongo que para no despertar las iras de la opinión pública) se refieren a sucesos como los descriptos como “la deformación de enseñanzas”, “un camino equivocado”, “mentes perturbadas y autodestructivas”. Es posible. Pero, si admitimos la existencia de “algo” después de la muerte, y que ese “algo” continúa su evolución en otros planos o mundos, ¿qué nos impide pensar que el suicidio pueda llevarnos a esos planos?.
Sé que aquí se formarán dos corrientes de lectores: los que seguirán considerando que lo que hizo esta gente fue una estupidez, y los que hablarán de “involución” en lugar de “evolución”. Con los segundos estoy de acuerdo; sólo que se trataría de una cuestión de matices y no de eventos. Un plano “más arriba” o dos planos “más abajo”, adónde irá el suicida es una discusión bizantina a los efectos de este trabajo. A los primeros, sólo quiero, modestamente, señalarles su propia contradicción: creen en una vida después de la muerte, quizás mejor que ésta, inefable, pero entienden que tan natural como acceder a ella después de una muerte no deseada es irracional suponerla de nuestra propia mano
Pero volvamos al planteo maniqueo de líneas arriba: o suponemos locura en estos suicidas, o fueron arrastrados por entidades negativas. Habiendo señalado lo endeble de suponer lo primero, pasemos a lo segundo: ¿qué prueba tenemos –tienen los contactados- que existen “extraterrestres positivos” y “extraterrestres negativos”?. ¿Porqué no podemos suponer que nuestra dualidad entre el Bien y el Mal, a la que somos tan afectos pero es en realidad sólo una expresión de nuestro propio primitivismo psicológico –porque sólo una mente primitiva antepone lo bueno a lo malo, lo claro a lo oscuro, conservadores versus liberales, Boca – River y toda una serie de antagonismos sin entender que el Universo es una sucesión infinita de matices- no existe en otros planetas o en otros planos?. El fanatismo de cualquier índole (otra expresión común a ese primitivismo psicológico del que hablaba antes) se caracteriza precisamente por un “o estás con nosotros o contra nosotros”, expresión de un absoluto irreconciliable con una realidad impregnada de relatividades. Si aún la –mítica o real, cada uno tiene su opinión- imagen de Satanás posiblemente no deba verse tan maligna como se nos propone (ver mi artículo “Satanás: el eterno Prometeo” en “Al Filo de la Realidad” Nº 15) es concepto de “bueno” o “malo” aplicable a la intencionalidad de un ser extraterrestre o extradimensional es poco menos que infantil. Por razones que se nos escaparían (seguramente por ese mismo abismo evolutivo que nos separa) la entidad que hoy cura el cáncer de una pequeña durante una visita de dormitorio podría ser la misma que mañana nos invite a suicidarnos para reunirnos en alguna gigantesca nave espacial de visita. Por simple economía de hipótesis, estamos ante un enigma. El de las visitas cósmicas y sus mensajes. Deberíamos comenzar entonces por suponerles un origen, independientemente de la diferencia, no se de sus manifestaciones, sino de sus supuestos propósitos.
El contactado Francisco Padrón supo escribir: “A raíz de los contactos me sentía como un autómata; tuve que luchar y rebelarme contra ellos, porque se me imponían una serie de ideas que desde luego no eran mías. Tuve problemas de desdoblamiento de la personalidad”.
Abducidos & Co.
Si bien no debería incluir en este trabajo a quienes han sido víctimas de abducción, me veo obligado a hacerlo con la salvedad de señalar que estos comentarios sólo son aplicables a aquellos que tras su experiencia devinieron en “contactados”. Si bien es cierto que se pueden inducir ciertos “raptos imaginarios” (por ejemplo bajo hipnosis) aparentemente iguales a los reales, aquellos no provocan efectos emocionales, tales como amnesia, sueños y pesadillas. Además, las lesiones de los abducidos reales no son psicógenas porque no se presentan abiertas.
Hay un perfil común en los abducidos: baja autoestima (pero esto también significa humildad), cierto grado de desconfianza, no se sienten a gusto con su cuerpo, presentan cierta perturbación de su identidad, déficit en la esfera interpersonal y fenómenos paranoides ligeros. Esto puede interpretarse de dos maneras opuestas: o el fenómeno es consecuencia de ese perfil, o ese perfil atrae al fenómeno.
Según el extraterrestre “contactador” (¿es correcto como opuesto a “contactado?) Seth: “…soy simplemente una esencia de energía personal que ya no está centrada en la materia física, una entidad no humana, sino una organización simbiótica de conocimiento de sí mismo extraída de una diversidad de fuentes de inteligencia y cuyo “campo de conciencia” ya no se encuentra en el reino de la materia o de la energía que ustedes conocen sino en un nivel de existencia algo distante del vuestro”. ¿Ángel o demonio?. Ni lo uno ni lo otro: simplemente, una entidad espiritual. Esto parecen ser, en síntesis, nuestros cósmicos amigos.
Es posible entonces que encontremos aquí una nueva correspondencia entre las apariciones marianas y lo extraterrestre. Sólo que esto último impulsa a la tecnología; aquella, retrotrae a lo inicial, es conservadora. Ambas son fuerzas de modelación del psiquismo humano. El OVNI es “luciferino”. La aparición, “yaveística”. Y tal vez hacen esto, porque la remodelación de la dimensión espiritual haga a su propia expansión. Todo ser busca alimentarse, reproducirse, conquistar territorio y evitar en lo posible el dolor y la muerte. Esta reacción es intrínseca a la naturaleza, en cualquier parte del Universo y de cualquier orden de evolución que estemos hablando. Y los seres espirituales no son ajenos a este principio.
Transcomunicación y exorcismos
Desde que el doctor Kenneth Ring propuso que las similitudes entre las experiencias cercanas a la muerte, las de tipo extracorporal y ciertas abducciones tenían demasiados elementos en común como para ignorarlas, surgió la idea, cada vez con más fuerzas, que tal vez el “plano” de existencia de las entidades que abducen o contactan no sea distinto de aquél habitados por los seres espirituales de todas las culturas. Y cuando en prácticas de “psicofonías” ciertas fuentes productoras de mensajes se autoidentificaron como “extraterrestres” surgió la polémica: ¿servía la Transcomunicación Instrumental igualmente para contactar extraterrestres y difuntos, o eran los segundos que se hacían pasar por los primeros?. ¿Y si todos ellos fueran lo mismo, provinieran del mismo punto espacio temporal?.
Apareció entonces el planeta “Marduk” donde, según algunos defensores de esta idea, iríamos a parar después de muertos. De forma tal que nuestros finados de hoy son los extraterrestres de mañana. Fantástica posibilidad. Claro que da pie a urticantes interrogantes. Por ejemplo: si todo esto abona la presunción que los “EBEs” son en realidad seres de otro plano, por consiguiente inasibles para nosotros, pura energía, ¿a qué vienen?. ¿En misión de paz y conocimiento, o con fines más peligrosos?.
¿Cuáles?. Pienso en cierta forma de “vampirismo pasíquico”. Pienso como decía Charles Fort: “… la Tierra es un terreno de nadie. Somos bienes muebles, ganado, donde ciertas Fuerzas combaten como el granjero protege a sus ovejas. ¿Y acaso las ovejas saben cuándo y cómo van al matadero?”.
Esto, sin duda, será execrado por todos los contactados y todos los abducidos. Es doloroso haberse sentido en cierta forma “elegido” y caer en la cuenta que en realidad uno ha sido manipulado con fines perversos (quién podría por ejemplo discutir que yo mismo, en este momento, estoy siendo manipulado para escribir estas líneas), pero debemos tener el coraje de evaluar sin cortapisas esta posibilidad.
Qué mejor que crear sectas, movimientos, lugares supuestamente “favorables” para concentraciones masivas de personas emocionalmente expectantes, provocar alteraciones emocionales en los fieles –el juego de “información – desinformación” de que son víctimas los contactados, como ya hemos visto- para poder alimentarse de estas “descargas psíquicas”. Si nosotros, seres materiales, nos alimentamos de materia, un ser “espiritual” o “energético”…¿de qué creen ustedes que se alimentará?.
También es posible que el “contactismo” sirva para conseguir nuevos cuerpos, si los “extraterrestres” no son materiales. ¿El fanatismo de ciertas sectas no será porque en realidad sus integrantes están “poseídos”?. Deberíamos encarar un estudio comparativo entre los casos de “obsesión” y “posesión” analizados en Parapsicología junto a contactos, abducidos y “ovnilatras”: estoy seguro que nos depararía grandes sorpresas.
Perdon, esto de escribir rapido y no leer lo que se escribe, tiene a veces sus inconvenientes…quise decir:
«No solo me gusta…me encanta,aunque yo hubiera sido menos moderado, quiza por mi impetu,
Muchas gracias por habernos colocado el caramelo en los labios…….ahora debemos endulzarnos…
juan carlos
Muy interesante Gustavo, me quede enganchado con la duda existencial;
de que se alimenta cada quien y cada cual, con que intención
finalidad o supuesto devenir.
Un abrazo Roberto Bs As Sds a Casa del Cóndor
Roberto! Lindo haberte tenido en nuestra casa y lástima no haber coincidido con vos. Un abrazo fraternal.
Demasiadas cuestiones se abordan en el escrito como para en pocas líneas contenerlo todo.
Por tanto, procuraré hacer un aporte desde mi propia experiencia, por si de esto resultare algo de valor para alguien.
Desde mi más temprana juventud me comunico regularmente con seres extracorpóreos, en un contexto controlado, y en el cual participan varias personas, que han venido trabajando juntas por años.
Cuando hablo de seres, en realidad hablo de espíritus en diverso grado de desmaterialización. Para la gráfica sirve la expresión seres de luz a seres más dominados por las tendencias materiales, y todos los intermedios.
La posibilidad de comunicarse entre seres, es una realidad, dentro de ciertos límites.
Lo que regula esta comunicación es lo que se podría denominar «afinidad».
Como la comunicación se efectúa entre un espíritu encarnado, y otro espíritu (que en determinadas condiciones también puede estarlo), la afinidad entre éste y aquél, más la del contexto en que se realiza, influyen.
Por tanto, el grado de desarrollo de lo humano, determina la naturaleza de lo comunicante.
Lo conocido en lo que hoy es denominado comunicacional, aplica aquí perfectamente.
En todo caso, el problema no radica en si es posible comunicar o no, el problema es conocer las reglas, los métodos, las normas, que hacen a que esta comunicación sea efectiva, y orientada a lo que quiere ser comunicado.
Cualquiera que conozca un poco del tema «comunicación» podrá darse una idea de la importancia que reviste el cuidado de la práctica, el proceso de aprendizaje, la revisión, la supervisión, etc., para luego poder evaluar conforme los resultados obtenidos.
Por lo tanto sostengo que, no alcanza con que «alguien» tenga la capacidad de entablar comunicación, sino en el «para qué su utiliza».
Sin pretender oficiar de decidor de verdad, tengo siempre presente algo que escuché de niño: «diálogo, es el contacto entre dos almas, con un fin trascendente».
Obvio resulta entonces que para alcanzar tal y determinado fin, es imprescindible utilizar un medio adecuado para llegar a él.
podría abundar sobre esto, contar los detalles que ha venido aportando la experiencia, pero… no creo sea éste el sentido hoy.
Concluyo: Es posible comunicar, y también es posible que esta comunicación esté plagada de vicios que distorsionan el obtenido, en el que se puede mezclar lo aparente con lo real, y en el que el grado de interferencia puede repercutir en la salud biopsicosocioespiritual de los intervinientes. Aconsejo abstenerse de este tipo de práctica si no se hace con la seriedad y metodología que ampare el resultado.
Disculpas por la extensión.
Fraternalmente:
Miguel Angel Pumilla
Miguel Angel :
Realmente tu mensaje es no solo interesante sino muy constructivo ,sincero y serio y sin alardes de saberlo todo sobre este misterio de la canalización y de los contactos que deberìa abordarse con criterio estrictamente cientìfico hasta donde sea factible. Serìa bueno saber tu criterio sobre estos puntos ¿ vale la pena intentar estos contactos ‘?¿Que podrìa aportarnos ?¿ En que condiciones?, ¿que reglas son importantes para evitar en lo posible sus peligros ?
Cordial saludo,
Gonzalo Echeverrri
¡Gustavo! Gracias por compartir este artículo.
«Pienso» que:
1ro.: Se comunican con los seres humanos, porque es algo posible, obviamente, pues si no, no lo harían.
2do.: Tiene que haber algún motivo para ello, y ese motivo tiene que ver con la búsqueda de un resultado, sea para nosotros, sea para «ellos».
3ro.: Puede que todos, aunque parezcan presentarse unos como más buenos, otros como menos, sirvan a una misma motivación o resultado. O bien, que unos busquen resultados diferentes a los demás.
4to.: Los más afectados son los contactados o abducidos: ¿Por qué lo hacen de esa manera? ¿Por qué sólo individualmente es el contacto? y, ¿Por qué se dan diferentes mensajes, que en muchos puntos no concuerdan con el de otros contactados?
5to.: Apoyo o secundo lo que dice Miguel Angel: Uno debería estar más y mejor preparado para una Comunicación o Contacto con Seres de otras dimensiones o Estados de Consciencia.
6to.: ¿Por qué no contactan con alguien similar a tu perfil, por ejemplo, alguien que cuestionaría muchas cosas que la mayoría de los contactados no se cuestionan?
7mo.: He leído los libros de la contactada Barbara Marciniack, algo de Urantia, Kryon, y he visto videos de Alex Collier, Sixto paz, entre otros. Es demasiada Información como para ser inventada o imaginada, y, en su mayoría, nos animan a ser, en pensamiento, sentimiento y acción, más espirituales. Nos dicen que Somos Creadores Eternos, etc. También nos hablan de nuestra «verdadera historia», que aunque son similares las que cuentan unos y otros, difieren en muchos detalles.
8vo.: Lo que veo, es que los mensajes de otros planos, NO son para todos, en un principio, sin embargo, como creo que ya habías escrito en otros artículos, no hubiera sido lo mismo que nunca se hubiesen manifestado o canalizado ninguno de esos mensajes, si no se hubiesen establecido esos contactos o Comunicaciones. A lo que voy, es que definitivamente, han generado un efecto en La Raza Humana, y que en Esencia, parece que buscan «Despertarnos», de un sueño que ni imaginamos que estamos soñando, y que por tanto lo tenemos como la realidad «única», basada más que nada en lo material, y en el «ver para creer», aunque con la tecnología de hoy, el sólo ver no basta para creer, y en otros casos, con sólo escuchar algo ya lo creemos…
9no.: Concuerdo con que nos estamos auto-destruyendo como Raza Humana, y que debemos de cambiar de rumbo, de actitud, de Expresión, para evitar eso.
10mo.: Debemos permanecer siempre abiertos-dispuestos a aprender, sin creerlo todo sólo porque sí, ni negarlo todo sólo porque sí.
Gusto en leerte y aportar algo Gustavo. ¡Un Sincero Abrazo!
Hola Gonzalo !
Gracias por tu comenario.
Puedo hablar sólo desde mí, es decir de lo experimentado, eso evita -decididamente- entrar en generalizaciones no verificadas.
Lograr distinguir entre lo aparente y lo real es todo un desafío, y en esto ayuda lo metodológico y el procedimiento científico.
Es bueno aclarar, que nada es absoluto y al margen de error, todo es experiencia y construcción de conocimiento.
Procuro responder tus preguntas:
1)- ¿vale pa pena?
Si se está en condiciones de preveer y superar los riesgos que entraña, se sabe el sentido y objetivo perseguido, se hace desde la seriedad y con la metodología, el encuadre y el contexto adecuado, vale la pena, caso contario abstenerse. Dicho de otra manera: no apato para curiosos. Hay que saber, como todo , Si uno piensa en hacer una travesía por un lugar que no conoce, se prepara para no exponerse a resultados indeseados.
En lo concreto, de nada sirve intentar comunicarse con el fin de que «alguien» se exprese sobre lo que no pueda ser verificado, no sea lógico, no persiga un fin trascendente (hacer mejor al hombre), o que diga un lugar x del que proviene, su morfología, medios de propulsión, forma de vida, propósito mesiánico, etc. etc.. esto sólo sirve para comerse un sapo crudo como se dice en la jerga de las buenas intenciones, de las que el camino a la perdición está embalsosado.
2)- ¿qué podría aportarnos?
De nada sirve que «alguien» venga a decirme lo que puedo encontrar en una biblioteca, o puede ser respondido desde una rama del conocimiento humano, o ahorrarme el trabajo de investigar sin verificar.
Se supone que si están al menos un paso más avanzados en el proceso evolutivo, puedan decir cómo es que atravesaron y lograron superar lós obstáculos naturales de los procesos de evolución y puedan hablar desde su experiencia y no venir a contar un lindo cuentito infantil.
En todo caso, estoy dispuesto a escuchar otro punto de vista que me haga repensar, me ayude a entender, y me promueva a un cambio positivo Algo que me revele una mirada superadora en lo concreto, y por sobre todo me ayude en mi proceso evolutivo libre, consciente y responsable.
En lo personal, soy Socratico y sostengo el «Nosce te ipsum» (conócete a tí mismo).
A nivel de conocimiento, sólo acepto aquello que tiene características de universalidad, y sea capaz de enfrentar cara a cara a la razón en todas las etapas de la humanidad.
El tiempo es valioso, y si no apunta a lo trascendente, prefiero compartir momentos con mi familia, mis amigos, o haciendo algo bueno por alguien que es la mejor manera de hacer algo bueno para mí mismo.
3)- ¿en qué condiciones?
Seriedad, buen criterio, sentido común, herramientas metodológicas, procedimiento científico, trabajo en equipo, supervisión, ambiente controlado, apartándose de los personalismos, las vanidades, los dogmatismos, prejuicios y preconceptos.
Es preferible rechazar cien verdades que aceptar una sola mentira.
4)- ¿qué reglas aplicar para evitar peligos?
Mucho de lo que expresara antes, pero además evitar cualquier práctica en solitario, sin un equipo de sostén preparado y unificado.
Supervisarse. He visto demasiada «locura mística» «pensamiento mágico», fantasía, apariencia, ausencia de realidad.
Humildad, «sólo sé que no sé nada»… estamos aprendiendo, nos equivocamos, corregimos y seguimos.
Someter todo a exámen y rechazar todo aquello que no encuadre o se aparte de la sana crítica.
Evitar lo espontáneo, el proceso comunicacional necesita para su producción una organización, no aceptar nada que pase fuera del trabajo de equipo, Si estamos en presencia de una entidad superior, comprenderá y se ajustará a nuestras pautas, lo valorará y respetará.
Es aconsejable que el «receptor» escriba lo que dice recibir, y en ningún caso tenga pérdida o disminución de consciencia. Lo escito queda allí y se somete al paso del tiempo y el exámen posterior, las palabras…. se las lleva el viento.
Parafraseando un notable cómico argentino: «Si lo vamos a hacer, vamos a hacerlo bien».
Otra vez sigo resultando extenso.
Disculpas.
Fraternalmente
Miguel Angel Pumilla
Desde mi investigación a nivel personal, ésto es lo que puedo aportar.
LOS MENSAJES SUBLIMINALES A LA TIERRA
El contexto denominado extra-terrestre como supuestas entidades inteligentes de origen exterior a nuestro planeta y los llamados o.v.n.i.s o luminarias que circundan por nuestro espacio aéreo, es mucho más complejo que el tratamiento efectuado tanto por la generalización de las investigaciones ufológicas como de su búsqueda e investigación científica.
Toda la expresión psicológica derivadas de las distintas experiencias incluidas las calificadas como religiosas que desde siempre han influenciado a una parte de la sociedad curiosa y reflexiva, está adecuadamente “proyectado” por inteligencias más allá del estado biológico con la misión de ofrecer pautas y enfoques para una unificación del ser humano.
Dado por nuestro estado mental, esa unificación tiende a desarrollarse con los mismos efectos y consecuencias que se originan comúnmente en los quehaceres sociales, y que por esa razón tienen sus idénticas confrontaciones, rivalidades y “extravagancias”. Pero de ahí se construye un estímulo fenomenológico subliminal e inconcreto para conectar y reflexionar hacia algo más extraordinario que la compleja y rutinaria vivencia social.
Antiguamente no había una técnica para simular lo inverosímil, aunque los relatos de sus experimentadores eran notablemente similares a los actuales. Hoy en día con la evolución tecnológica de manejo civil y gubernamental con su cierta semejanza a producir lo sorprendente, es más factible simular artimañas y confusiones estructuradas para ciertas maquinaciones debido a lo inconcreto, provocando razonamientos fáciles por algunos estudiosos e introduciendo lógicas cómodas para su desaprobación de su esencia y existente fenomenología.
Una aceptación del origen extra-terrestre como también seres de evolución orgánica, nos lleva a constituir diversos conceptos equivalentes a los que actualmente procesamos nosotros del mismo modo como seres orgánicos y limitados. De ahí, la suposición que tengan nuestros mismos problemas en las distancias para los viajes interestelares.
Una inteligencia desarrollándose en un soporte o estado biológico no puede expandirse más allá de ciertos límites galácticos obviamente por estar “atrapadas” en leyes como son el espacio y el tiempo, impidiendo la navegación espacial tripulada por las distancias extremas.
Ahora bien, después de un proceso de evolución biológica, la inteligencia súper desarrollada prospera después sin soporte biológico (dominando la materia) interesándose y estructurando diferentes formas de comunicación organizadamente hacia todo lo que se encuentra con un proceso inteligente inferior y en desarrollo.
“Ellos”, como ciertas inteligencias más evolutivas, pero aún afianzados a nuestro planeta (y como iniciadores de las grandes culturas de nuestro mundo) están para dirigir diversos “trabajos” hacia los moradores biológicos actuales. Esto se manifiesta por mediación de las conductas psicológicas de los procesos de las creencias ocasionadas por sus manifestaciones, conceptuadas algunas de ellas como “apariciones marianas” y más actualmente como “ovnis” en conjunto con los contextos difundidos de su denominado contactísmo; todo ello más adaptado como proceso interactivo por el avance gradual psicológico y tecnológico.
Con el transcurso de un progreso ya avanzado en un planeta, se sintetiza a producirse conjunciones grupales o colectivas hacia los “más adelantados” cuando alcance su culminación, pues una cosa es la evolución que forma parte del colectivo y otra es la espiritualidad individual que no forma parte de éste. Como espiritualidad no me estoy refiriendo a las creencias religiosas o conductas referenciales a éstas, sino a la culminación de la verdadera sabiduría, estado este cumplido por la eliminación en el cerebro de distintas cargas y opresiones conceptuales derivadas del estado biológico. Un final de progreso biológico inteligente se disuelve hacia diversas expansiones, e impulsando diversidad de proyectos por el cosmos para la formación de la conciencia para nuevos sucesores biológicos de concretos planetas, incluido el nuestro.
Los progresos biológicos ya evolucionados hacia una etapa superior en nuestro planeta y en simbiosis con otros dominios inteligentes, son los que provocan los diferentes signos de mensajes de índole subliminal, aquellos que interactúan generando que la energía psicológica de la masa social se estimule, experimente y busque una interpretación. De ahí, la estrategia o el plan del proceso inteligente para modificar al ser humano mediante la reflexión e interiorización más allá de nuestras maquinaciones y organizaciones para nosotros mismos.
Todo lo que dices Gustavo es solamente verdad,la hipocecia que se ve es grande y se hace pequeña a los ojos de los demas, te saludo y felicito
Perdon, pero lo senalado es solo parte del Panorama general de los contactados o de los avistamientos de seres extraterrestres, y no deja de ser interesante sin embargo considerar que han llegado hasta la Tierra no solo desde miles de anos sino que tambien ultimamente, al parecer mas seguido (aunque lo seguido se puede confundir con «lo informado», pues la informacion debido a la Internet – que malamente puede ser totalmente controlada como la Prensa y la Tv en cuanto anoticias, nos ha permitido recibir las «otras noticias prohibidas» mas seguido por la existencia de la Internet y asi tener la ILUSION de que todo es mas frecuente ahora..! ) cosa que logicamente a principios e incluso mediados de Siglo pasado no era posible – por el control y omision de esta clase de noticias sobre Ovnis o Ets avistados. Dicho todo lo anterior cabe agregar que hay en realidad ya mas de 10 clases diferentes – por lo menos – de seres de distintas Civilizaciones Ets que nos han visitado – unos por Curiosidad otros para Experimentar con humanos y otros estudiar Humanos, sin dejar de lado aquellos que los raptan hasta en forma seguida, familia tras familia – madres, hijas, etc. Ahora bien, dejando de lado esos ultimos, podemos considerar los que en este Articulo se ha propuesto el autor senalar como poisbles «pintores espeirituales» por decirlo asi, pintores porque dejan una impresion y una intencion que se debe examinar posteriormente ante lo sucedido – crean un HECHO para dejarlo en suspenso ante nuestra comprension Humana y no dejan entrever la RESPUESTA a lo que plantean o mejor dicho su AGENDA no queda clara. Desean guiar hacia a algun lado a la Humanidad…? o solo desean crear la Duda..? o nosotros nos hemos enredado en nuestras propias elucubraciones e intenciones posibles o probales de estos Ets..? No se estar pecando de SOBERBIA HUMANA al creerse que somos Muy IMPORTANTES para otros seres que vijan grandes distancias hacia nosotros y nos dejan un Misterio…? pero, aca cabe tambien la Antigua Agenda de los Reptiloides con su creacion de los Simbolos y doctrinas de la MASONERIA, con su OJO que todo lo ve y sus ritos que se encuentraron en cuevas de ECUADOR y COLOMBIA con estatuillas de Reptiloides, Piramides minusculas de piedra y ojos refulgentes con tiempo arqueologico de miles de anos…! en otras palabras he ahi – los que se han ocultado durante miles de anos y ahora recien se les ha descubierto (KLAUS DONNA un investigador Austriaco – fue quien hallo estas figurillas y piedras triangulares en Ecuador y Colombia)…es obvio que estos Reptiloides vinieron no solo ahora sino que ya hace miles de anos a Propagandear las ideas masonicas de ocultismo y otras yerbas – y es obvio que al principio les fracaso con los indios primitivos de Ecuador y Colombia que hallaron miles de anos atras, pero que ahora ya se establecieron de nuevo aplicando lo mismo desde los anos del 1800’s en adelante y que ahora han tenido gran exito en America, Inglaterra y Europa. Asi, los planes ocultos de estos Reptiloides que se dice viven y habitan cuevas o pasadizos subterraneos en todos lados, son obviamente quienes les prometen el Oro y el Poder a los dirigentes del Mundo, los cuales les siguen en todas sus maniobras, paso a paso hacia un llamado control Mundial, tanto Espiritual y siniestro como economico destruyendo las Clases medias; ante lo cual los unicos que se oponen son Rusia y China. Asi, ya no queda tiempo para resistir, pues no ha habido mayor resistencia por la falta de Educacion de las masas, y solo los sentimientos «de que algo se trama en la oscuridad» ha provocado ciertas reacciones en algunos paises, pero que no tienen mayor peso hasta ahora. El Mundo occidental actual asi ya esta sojuzgado por estos masones y sus politicas y agenda. Veremos que sucedera en lo queda de tiempo para un enfrentamiento Final, si es que lo hay o un desenmascaramiento de America hablandole al resto del Mundo que Ellos ya han tenido y tienen contacto con Reptiloides y Aliens grises y que todos deben rendirse ante aquellos o hacerles pleitesia y recibirlos como salvadores, siendo que lo unico que son y seran dictadores.
LOS CONTACTADOS
Los Extraterrestres han dicho en varias ocasiones, a través de sus Operadores, que su contacto personal con los terrestres es limitado, por razones particulares que ya han mencionado otras veces y que dependen de órdenes pre-establecidas por sus sabios dirigentes. Hasta el momento, ese contacto sólo ha podido realizarse con ciertas personas y no con todas. Por aquellos que han pretendido contactarlos, con el fin de desarrollar una emotividad de entusiasmo mental o para adquirir una fe racional ficticia, Ellos han podido hacer muy poco, y este poco debía tender a la supresión del egoísmo y del dogmatismo.
Aquellos que vienen de otros mundos del espacio, mucho más avanzados que el nuestro, deseaban Almas capaces, serias, amantes de la Verdad, altruistas y afectuosas. ¿Acaso era fácil encontrarlas entre los hombres de esta Generación? Difícil en verdad, y aún, casi imposible. Ellos han escogido, por consiguiente, las mejores criaturas humanas que han podido encontrar, susceptibles de ser preparadas para una instrucción constante, a la que ellas estaban destinadas. Ante todo, Ellos han inspirado en esas Almas escogidas, un Espíritu de Amor y de tolerancia hacia todas las opiniones que no encuentran el camino correcto dentro de sus tendencias mentales. Estas almas, poco a poco, se han ido elevando por encima de todos los prejuicios dogmáticos, preparándose, de esta forma, siendo perseverantes y valerosas, a recorrer el sendero de esta Verdad, que al final los ha vuelto libres y les permitirá orbitar sobre planos dimensionales superiores.
Tesoros de conocimientos universales les han sido prodigados a estas Almas y cuando los Mentores Siderales piensen que el momento ha llegado, pronunciarán la llamada de su nombre. Mientras esto ocurre, Ellos suscitan un sentido de paciente espera y controlan las emotividades psico-físicas que se desarrollan en esta espera.
Siempre ha habido obsesos de diversos temas, pero ahora comienzan a proliferar en la parcela de los perseguidores de los Contactados. Estos individuos de aviesas intenciones, generalmente derivadas de despechos y frustraciones, a los que conocéis bien, están instalados en su poltrona de incredulidad y desparraman sus ataques calumniosos, sin que hasta ahora nadie se haya encargado de penalizarlos, dándoles el escarmiento que merecen. El tiempo venidero se encargará de ello.
Con respecto a los Contactos, que los hay muchos y auténticos, yo os invito a meditar, a evaluar los hechos y a reflexionar para sacar las conclusiones que se imponen y para poder comprender el real significado de la presencia Extraterrestre, esa gran y fascinante Verdad de nuestro tiempo.
Aún si estáis en la obligación de considerar nuevas ideas, que son difíciles de aceptar por vuestra lógica, debéis intentarlo con fe, inteligencia y valor, si queréis descubrir, sinceramente, el alcance de esta gran realidad que sólo puede aparecer en su contexto real.
Vosotros disponéis de miles de hechos, al alcance de vuestra inteligencia, que pueden ser redimensionados y estudiados con una nueva óptica y de los cuales vuestro saber puede beneficiarse. Personalmente, soy perfectamente consciente del malestar psicológico y mental que impide en algunos creer en un gran acontecimiento de este tipo; sin embargo, es cierto que no podrá impediros dominar progresivamente una Verdad tan grande.
Ya sabéis que las grandes Verdades han sido siempre las víctimas del escepticismo, esta negación de todo lo que escapa a la comprensión de la inteligencia humana, particularmente cuando ésta prefiere ceñirse a las concepciones estrechas que le impiden liberarse de las ideas preconcebidas, ya sobrepasadas por los acontecimientos del nuevo tiempo.
Muchos hombres, todavía viven sus propia existencia en los límites estrechos de sus visiones terrestres, prehistóricas y supersticiosas. Equivocados, prefieren huir la nueva era, el tiempo del nuevo destino, por miedo de descubrir el abismo oscuro de su ignorancia y de sus presunciones atávicas.
Pero, por suerte para la humanidad, existe siempre una minoría de hombres y mujeres de buena voluntad, que han sentido y sienten interiormente la Luz activa de las Verdades Eternas. A ellos les ha sido concedido vivir la maravillosa experiencia del contacto personal con Seres de otros mundos y han aceptado la labor ingrata de divulgarlo, teniendo que pagar por Amor a la Verdad un precio muy alto. Pero, ellos saben que su humilde acción hecha de duros sacrificios espirituales, morales y materiales, no será un trabajo vano, y el tiempo les dará la recompensa que sus Almas hayan merecido.
Yo no lo digo por presunción profética, sino a causa de una certeza absoluta.
Un abrazo fraternal,
José García Álvarez