Un gesto político hacia la Nueva Espiritualidad

Para algunos se tratará de una anécdota intrascendente. Otros se entusiasmarán ante las perspectivas que significa. Creo que ambos extremos estarían igualmente equivocados. Es nada más (pero también; nada menos) que un gesto político hacia la Nueva Espiritualidad. Que debe ser puesto en contexto. Pero que permite extrapolar a futuro conductas imitativas.

En ocasión de la realización, en setiembre de 2013, del XVII Encuentro Iberoamericano de Redes de Luz y VII de Redluz Argentina, Pueblos Originarios y Espiritualidad, en Paraná, Entre Ríos, Argentina, organizado por el Centro de Armonización Integral y el Kalpulli y Temazcal «Casa del Cóndor», informamos que el Concejo Deliberante de esta ciudad había declarado «de interés» dicho evento. Gracias al eficaz trabajo de la Dra María Emilia Rolandelli Bértoli y el acompañamiento del concejal Juan Manuel Huus, se presentaron los fundamentos y expectativas del Encuentro, lo que motivó, como respuesta de ese Cuerpo Legislativo, este decreto.

¿Por qué queremos llamar la atención de ustedes sobre esto?. En primer lugar, aquí no hay partidismo ni amiguismos: quisiera de mis lectores la buena voluntad de observar que no se trata de simpatías hacia la facción política mayoritaria (que no la hay) ni vínculos personales con ese estamento que hayan «acelerado» los tiempos. El decreto surgiò del Concejo casi espontáneamente. En segundo lugar, quiuero llamar la atención de ustedes al contenido: más allá de la formalidad burocrática, puede definirse como el comentario político más espiritualista que hayamos leído en mucho tiempo.

He conversado con muchos iguales qué papel debería jugar la política en esta Nueva Era que asoma en el horizonte. En general, las opiniones que recibo tienen que ver con un creciente escepticismo hacia políticos y partidos. Pero estamos encerrados en un laberinto: las condiciones ideales de solidaridad, fraternidad y coopèrativismo que quizás deberían primar en la sociedad humana son utópicas en esta fase de evolución: aún necesitamos que nos representen, que gestionen por nosotros. Alguien dirá que puede hacerse desde otro lugar: ONGs, asociaciones vecinales, emprendimientos privados. Lo que se les escapa es que cuando esas estructuras alternativas se ocupen de la «cosa pública» inevitablemente lo que hacen es política. Pue slo político trasciende lo partidista. Y, para hacer algo, hay que hacer política aunque no querramos llamarla así. Si tengo ideas sociales (y vaya si las tengo) y trato de llevarlas a la práctica, inevitablemente deberé sumar voluntades. Acceder a espacios donde exprese la voz de los sin voz. Representarlos. Pónganle el rótulo que deseen: inwevitablemente están haciendo política.

El punto, entonces, es preguntarnos si lograr que, aunque sea por unas horas, los políticos se den el tiempo de reflexionar la «cosa espiritual» y obrar en consecuencia: un decreto es una mera formalidad, sí. Una instancia burocrática, sí. Pero es también un antecedente, un espacio, un número de manos que por unanimidad y sin ganar nada a cambio se alzaron para apoyarlo.

Y eso no es poca cosa.Porque pensar que durante varios minutos estas palabras resonaron en el Salón Deliberante, con concejales escuchando, que en ese recinto se habló de «consciencia planetaria», de «la Madre Tierra», de «Unidad en la Diversidad» y la importancia del «Equinoccio de Primavera» en la realización de este evento, emociona. Sé que no faltarán «opinadores» simplistas que dirán que ese cuerpo deliberante tendría que dedicar su tiempos a solucionar problemas más acuciantes de la ciudad. Y es cierto que habrá situaciones más urgentes. Pero esto es importante. Porque sólo enfocando la atención propia y ajena en la espiritualidad, en la proactividad, en lo que suma y no lo que resta podremos restarle energía a la negatividad, la entropía, la dessperanza, la desazón.

Pido unos minutos de su atención para leer los Fundamentos dado por los propios concejales:

«CONSIDERANDO que este proyecto gestado hace años por Ricardo Ocampo, de México, y que existe como Red Iberoamericana de Luz, RedLuz Argentina, etc., nuclea a cientos de miles de amigos y amigas de todo el mundo hispanoparlante hermanados en el despertar espiritual, las Terapias Holísticas y todas las formas posibles de crear actitudes de servicio en esta Era de Acuario, hermanados en el pensamiento «Unidad en la Diversidad»».

«Que convoca a toda la gran comunidad de trabajadores de Luz en Argentina, Latinoamérica y el mundo donde, cada unoi desde su línea de trabajo y sus dinámicas personales aportan cotidianamente un servicio a este despertar a la nueva tierra y el nuevo tiempo que juntos, unidos en la diversidad, están cocreando».

«Que en estos tiempos hay dos ideas fundamentales en las que se basa la nueva espiritualidad, por un lado el respeto a todos los caminos, crencias o disciplinas para llegar a la trascendencia. Por otro, la búsqueda de la unidad».

«Que la humanidad está entrando en una fase de conciencia planetaria, a través de la globalización y los grandes medios masivos de comunicación. También los problemas generados por los cambios que sufre nuestra Madre Tierra nos hacen ver las cosas desde una perspectiva distancia. Estas dos ideas, diferencias y unidad, parecen ser contradictorias. Pero no lo son».

«Que el respeto por la cultura de cada pueblo, su idiosincrasia, su forma única de estructurar el mundo, debe mantenerse. Ningún pueblo debe renunciar a su esencia cultural, a su básica manera de conectarse con Dios («religándose», de ahí «religión») de expresar su arte o filosofía o sus usos y costumbres característicos. De igual manera cada individuo dentro de cada tradición debe ser aceptado en su divergencia o posición. Los dogmas y las rigideces de pensamiento -pretender que mi forma de acceder a la verdad sea la universal o la única válida- quedan atrás».

«Que es deseable que los humanos formen una unidad, eso no significa que deban tener exactamente los mismos pensamientos, los mismos deseos, los mismos gustos, las mismas actividades. La vida es extraordinariamente rica en posibilidades diversas, y sólo en el aspecto esencial deben encontrar la unidad».

«Cada uno de nosotros está constituido de tres principios fundamentales: el intelecto, el corazón y la voluntad. El intelecto necesita luz (el conocimiento), el corazón necesita el calor (el amor) y la voluntad quiere actuar tratando de manifestar la luz del intelecto y el calor del corazón. En este sentido los humanos son idénticos en esta estructura fundamental y en las necesidades y aspiraciones que corresponden a esta estructura. Que sean o no conscientes de ello, que acepten o no la idea, ésta es la verdad de su ser, y es en esta dirección que deben trabajar todos para formar una unidad».

«Que este Evento se llevará a cabo los días 20, 21 y 22 de setiembre de 2013, en pleno Equinoccio de Primavera, donde conferencistas, talleres, exposición y venta de productos y servicios, temazcales harán de la ocasión un festival de la alegría y el espíritu»

«POR ELLO EL HONORABLE CONCEJO DELIBERANTE DE LA MUNICIPALIDAD DE PARANÁ sanciona con fuerza de DECRETO declarándose de interés de este Honorable Cuerpo el VII Encuentro Argentino y XVII Iberoamericano de Pueblos Orioginarios, Espiritualidad y Redes de Luz…..»