EL PORTAL DIMENSIONAL DE TIWANAKU

En la estación de ferrocarril
En la estación de ferrocarril

Confieso que medité largamente el título de este artículo. Me debatía entre darle una objetividad aséptica (ya saben un lustre de academicismo que lo haga digerible  al esófago hipersensible de los cientificistas), simplemente insinuar, con sesgos velados y como pidiendo disculpas, un cierto contenido esotérico, o lanzarme abiertamente a las fauces de los leones, sin negarles (o negarme) las sensaciones vividas cuando lo visité. Adivinen mi elección.

Es que lo que puede interpretarse como un devaneo literario o, en el peor escenario posible, un síntoma preclaro de brote psicótico, fue parta mí una avalancha de percepciones, sensaciones, imágenes, “flashbacks”, preguntas y más preguntas. Y no es un debate menor. Los que hacemos oficio del arte de escribir sobre cuestiones tan lindantes con lo fantástico, enfrentamos todos los días la dicotomía de resultar potables para un ámbito académico, en cuyo caso tenemos que ceñirnos a normas sobre la buena manera de escribir un artículo científico, o pensamos en ese enorme público que espera otras vivencias. En lo personal creo que escribo (disculpen) para mí; y no puedo negarme una evolución desde el mero recabado de pruebas y evidencias –cosa que sigue siendo muy importante, qué duda cabe- hasta el permitirme escuchar a mi corazón cuando deambulo en sitios sagrados. Algunos dirán que lo hago para vender más (y la pregunta sería “¿vender qué?”). Otros, dudarán de mi cordura. Sepan disculpar: me importa un bledo. Creo haber dado sobrada muestra de objetividad y racionalidad (que no racionalismo) demasiadas veces como para prohibirme el placer de aunar sensaciones y reflexiones en lo que será este trabajo.

Curado entonces en salud, la cuestión siguiente era si alimentar el viejo concepto dänikeneano de guías extraterrestres dirigiendo este monumento al misterio, o presuponer otro origen. Por un colectivo de razones que iré desgranando, mi teoría es que Tiwanaku era la puerta a otras dimensiones, un verdadero portal cósmico.

Tiwanaku (o Tiahuanaco, en la grafía hispana, pero prefiero respetar la aymara, si bien nadie está seguro que ese haya sido siempre su verdadero nombre y menos el original) es un término sobre el que aún se discute, simplemente, si es de origen aymara o queshwa. El nombre original en Aymara del lugar de Tiahuanaco no era el que conocemos hoy, sino que se llamaba «Taypicala», que en Aymara quiere decir «La piedra en el centro», demostrando que, para sus habitantes, el centro ceremonial de Tiahuanaco era el centro de todo su universo conocido.

•          Tiyay (sentarse) y wanaku (guanaco), es decir: «Siéntate, guanaco»

•          Sut’iyay (alborada) y wañuq (participio del verbo morir), lo cual significaría: «Alborada moribunda» (gramaticalmente erróneo, lo correcto sería wañuq sut’iyay)

Como se ve, todo entra en el terreno de la especulación. Como su antigüedad. “Oficialmente”, se le considera erigido en torno al año 1.500 AC y prolongándose hasta el 1.200 AC. Pero varias fuentes autorizadas (claro que execradas del academicismo al que hiciéramos referencia) señalan su erección alrededor del 16.000 AC.  A veinte kilómetros del lago Titicaca y a 3.885 metros sobre el nivel del mar, aún si aceptamos los parámetros conservadores no quedan dudas de su fuerza primigenia frente a la cual la cultura inca empalidece. Acotación al margen: hay un interesante paralelismo entre incas y aztecas, que me gustaría señalar, pues en los manuales de texto escolares de todo el mundo, cuando se quiere hablar de culturas avanzadas en la América precolombina, siempre se cita a éstas. Y coom ya he descrito en muchas ocasiones, los aztecas (más bien deberíamos llamarlos “tenochcas”) pasaron a la Historia por nutrise de la sabiduría y tecnología de culturas que los precedieron (Olmecas y toltecas) pero, muy especialmente, por estar en el escenario presentes a la llegada d elos españoles. Y lo mismo ocurriò en este Sur; los incas se apoyaron en culturas previas (aymaras y tiwanakanos, entre otros) y eran el Imperio dominante a la llegada de los conquistadores. Y así como los aztecas tuvieron su Cortés, los incas tuvieron su Pizarro…

Toltecas y Aymaras, ¿una sola nación?

Hay muchas evidencias que en el pasado ambos pueblos estaban en pleno contacto. En México y aquí, desde antes de la Conquista, el «tamal» es el mismo tipo de comida (harina de maíz y carne cocida envuelta en la chala de la mazorca). «Tata», en quechua, es «papá» y en nahuatl, «abuelo». Los incas tenían los «kipus», notación con cuerdas trenzadas, y los toltecas, el «mecatl». Los «purépechas», etnia mexicana sobre el Pacífico, tienen las raíces lingüísticas del quechua («k’us», «kius») y se han descubierto grandes canoas por las que navegaban por la costa entre Perú y México. Ambos pueblos tenían el ciclo cósmico de 52 años, y el año sagrado de 270 días. En Xochimilco, hoy un barrio de México DF, antes un brazo del gigantesco lago Texcoco, los tenochcas construyeron islas artificiales -aún en uso- de juncos trenzados, llamadas «chinampas». Y la etnia de los «urus», en el Titicaca, viven aún hoy sobre islas artificiales de totora. En el mismo Titicaca existen dos islas sagradas: la del Sol y la de la Luna. Esta última es llamada «isla serpiente» o «Coati» en aymara, y en nahuatl «coatl» es, justamente, «serpiente».

De ahí la sensatez de la historia que dice que en Xochicalco, en el año 640 de nuestra era, se reunieron sabios de toda la América precolombina para unificar calendarios. O, como se dice, se reunieron todos los «ixachitekatl»(indígena americano, nativo americano, amerindio, gente autóctona que habita en las tierras de todo el continente americano, desde Alaska y Groelandia, hasta la Patagonia chileno-argentina).

Mecatl, sistema de notación aritmético y contable nahuatl idéntico a los "kipus" de nuestro sur
Mecatl, sistema de notación aritmético y contable nahuatl idéntico a los "kipus" de nuestro sur
Canoa purépecha para viajes portulanos
Canoa purépecha para viajes portulanos
Cartel explicativo de las raíces queshwa de la lengua purépecha
Cartel explicativo de las raíces queshwa de la lengua purépecha

Un guía excepcional

Ya comenté en alguna ocasión que seguí en este derrotero los pasos de mi amiga Débora Goldstern, la Alexandra David-Neel argentina. Por recomendación de ella, logré contactar _(y a partir de allí forjar una cálida amistad) con el escritor y arqueólogo (algunos dirían “amateur”; en tanto y en cuanto fue adscripto al INAr, el ente oficial de prospección arqueológica en Bolivia por lo meritorio de sus trabajos, es un arqueólogo por derecho propio, y sobre él volveremos en este espacio en el futuro en muchas oportunidades) Antonio Portugal. Toda descripción de sus cualidades que yo haga aquì será exigüa, para conocerle en profundidad, de modo que sugiero leer la excelente entrevista que la misma Débora le hiciera en su blog “Crónica Subterránea”, haciendo click aquì. ¡Alto!. Esperen. Prométanme, cuando menos, que si hacen “ahora” click y van al reportaje, luego volverán por aquí, sí?. No me gusta quedar hablando solo.

En el terreno

¿Cómo organizar claramente las sensaciones, las evidencias, las presunciones?. Permítanme llevarles de la mano por una galería de fotos, para ir comprendiendo el contexto.

El Kalassasaya, desde la cima de la Akapana
El Kalassasaya, desde la cima de la Akapana

Uno de los puntos más interesantes el Kalassasaya, al que se supone uno de los centros ceremoniales en uso simultáneo. Aquí, visto desde la cima de la akapana, pirámide que domina el conjunto, expoliada en buena medida por los españoles por la sospecha de un tesoro enterrado. La reconstrucción supuesta (y que se prosigue en forma paulatina) ubica en su cima una «Chakana», cruz escalonada que se ha transformada en distintiva de la sabiduría ancestral de estas regiones, cavada como un lago pequeño, alrededor del cual se disponían los sacerdotes que, observando el ingreso del reflejo de los astros sobre el agua, podían así efectuar cálculos calendáricos. Es sólo una hipótesis, y pueden brindarse otras, tal vez más audaces pero no menos probables. En la akapana efectué algunas experiencias, como medir radiestésicamente el lugar (con la certeza personal de la existencia de una cámara subterránea aún no descubierta y la prolongación de dos pasadizos subterráneos en dirección a la cercana serranía). Permítanme acotar aquì que es un hecho que aún no se ha excavado más del 5 % del lugar, por lo que muchas sorpresas aguardan bajo tierra. En ese contexto, la afirmación de Antonio -reflejado en dos de sus libros, «La Chinkana del Titicaca» y «Ciudades Secretas de los Andes»-, en el sentido que habría una «ciudad» subterránea aún no descubierta a la que él habría podido acceder en la forma de un viaje astral, no resulta tan exótica como parece. Aún más, repetí la experiencia que me enseñaran mis hermanos mexicanos de estimular mi propia «visión astral» por contacto meditativo sobre los monumentos, y tuve así la primera de las más fuertes sensaciones visuales: la presencia de grandes oquedades bajo tierra. ¿Mi imaginación?. Puede ser. O puede no ser.

"Penduleando" en la Akapana
"Penduleando" en la Akapana
Meditando sobre estelas
Meditando sobre estelas

En el Kalassasaya se encuentra la turísticamente famosa «Puerta del Sol». Que no es la única, como se cree. Por lo menos, se han descubierto otras dos, que aún permanecen tumbadas. Todas, talladas en un sólo bloque de piedera finamente pulida, así como la «Puerta de la Luna», que me hizo rememorar inevitablemente al dolmen (¿cómo llamarlo de otra manera?) sobre la pi8rámide de Xochitecatl, en México, centro de un intenso y aún presente culto a la Diosa Madre. Si bien en Tiwanaku no tenemos un trilito como ese verdadero «oopart» («out of place artifact», «artefacto fuera de lugar») mexicano, el aprecido es sorprendente.

Puerta de la Luna
Puerta de la Luna
Dolmen en Xochitecatl
Dolmen en Xochitecatl

Cuál es la finalidad de la (o las) Puerta del Sol, es algo que aún se ignora. Para empezar, no está en el lugar original, a todas luces. Por cierto, nada parece estar en su lugar… Ésta fue la segunda impresión demoledor que tuve: al buen rato de estar paseándonos entre las ruinas, le pedí a Antonio me permitiera retirarme a meditar en soledad un rato. Así lo hice, trepando a otro montículo, tardíamente inca, desde el cual se tiene un panorama general del lugar. Fue sólo cerrar los ojos y tener la certeza inenarrable que todo estaba fuera de sitio, y aún más, que era más lo que faltaba que lo que se veía.

Bajé un largo rato después, y deambulé en silencio entre las ruinas meditando sobre lo que sentía. Al alcanzar a mi amigo, le referí, como hago ahora con ustedes, la íntima convicción que el lugar me generaba. Había leído las noches anteriores los dos libros que Antonio generosamente me obsequió y repasando su concepción -avalada por otros- que en algún lugar se encontraban cámaras subterráneas con «desconocida maquinaria» de objeto desconocido, expresé una leve disensión: no creo que en algún lugar oculto de Tiwanaku haya maquinarias. Creo que todo Tiwanaku ES la maquinaria.

¿Maquinaria para qué?. Déjenme fabular, si quieren verlo así: se trata de una tecnología espiritual, un conjunto donde el conocimiento de leyes trascendentes corrían el velo entre los mundos, entre los planos. Vi a Tiwanaku como un rompecabezas del cual se perdió el sentido original y, al intentar reconstruirlo, las piezas fueron cambiadas de lugar, forzándose un «orden aparente», montándose las bambalinas del cuento que se quiere contar. Imaginen ustedes que nuestra civilización desaparece y sólo sobreviven unos pocos grupos de personas que vuelven al primitivismo. Milenios después, la civilización surge otra vez, y esos arqueólogos del futuro encuentran los restos destrozados de una central eléctrica y, luego que en los siglos anteriores se usaron algunos de esos restos funcionalmente para construcciones prosaicas, tratan, con lo que queda, de recuperar un sentido, uniendo las piezas de cualquier forma…

La Puerta del Sol
La Puerta del Sol

De esto, evidencias sobran: basta acercarse a la iglesia del pequeño pueblo de Tiahuanaco -que se encuentra a tiro de piedra del sitio arqueológico- para ver la iglesia, íntegramente construida con bloques extraídos del centro ceremonial, como prueban las fotografías donde se advierte que ni siquiera se tomaron la molestia de quitar los sobrerrelieves originales, así como las «agarraderas» talladas con maestría en las piedras para facilitar su acarreo. Y esto es sólo un botón de muestra: innumerables construcciones hispanas, en el lugar y hasta en La Paz, se hicieron aprovechando como «cantera» este lugar sagrado. Lo que, a propósito, nos lleva a otro problema: el lugar de origen del material para levantar la ciudadela. Porque no era originario, sino provenientes de canteras, en algunos casos, a ciento veinte kilómetros de distancia…. Si toman ustedes en cuenta que en el centro ceremonial de Puma – Punku algunos bloques pesan hasta ¡120 toneladas!, su sólo acarreo presenta un enigma mayor que el de las pirámides de Egipto.

Frente de la iglesia de Tiahuanaco
Frente de la iglesia de Tiahuanaco
Bloque en la iglesia con el sistema de agarre y manipulación original de Tiwanaku
Bloque en la iglesia con el sistema de agarre y manipulación original de Tiwanaku

El Kalassasaya y la Puerta del Sol son imágenes casi icónicas de Tiwanaku. Pero lo verdaderamente «extraterrestre» es el Puma – Punku. Allí llamaron poderosamente mi atención dos cosas: la monstruosidad de algunos bloques, y el fino pulido y tallado, milimétrico, de otros. Sinceramente, no sé que es lo que aún me sorprende más. en el segundo caso, a la tersura de la piedra, que casi hace pensar en concreto (por lo pronto, Portugal y otros investigadores recuerdan las leyendas ancestrales que cuentan que los antiguos sabían «ablandar» la piedra), se suma el tallado, terso, donde uno desliza la mano sobre su superficie y parece estar haciéndolo sobre una superficie acerada. Algunas molduras son escalonadas y cada desnivel tiene unos cinco milímetros, con lo cual la pregunta obvia es qué instrumentos fueron capaces de un trabajo tan delicado. Por cierto, no los cinceles de piedra, cobre y bronce que los libros de texto les supone a los tiwanakanos.

Megalito en Puma Punku
Megalito en Puma Punku
Vista lateral de la pirámide de Puma Punku, aún en proceso de excavación
Vista lateral de la pirámide de Puma Punku, aún en proceso de excavación
Conductos en la pirámide. Se discute si son acueductos, ventilaciones u otra cosa (fotografía tomada deslizándome en su interior....)
Conductos en la pirámide. Se discute si son acueductos, ventilaciones u otra cosa (fotografía tomada deslizándome en su interior....)
(... con un Antonio persiguiéndome como un "paparazzi" entretenido en dejar constancia de cada irregularidad que cometía)
(... con un Antonio persiguiéndome como un "paparazzi" entretenido en dejar constancia de cada irregularidad que cometía)

Los enigmas del Tiwanaku al aire libre no le van en zaga a los que se encuentran en los dos museos de sitio que se hallan en el lugar. Allí se multiplican afigies y monolitos, como el famosísimo «Bennet», al que las leyendas le atribuyen propiedades preternaturales, o el «Ponce». También, se repiten los frisos con «chakanas» y alegorías, y es una pregunta que aún quisiera responderme el porqué se encuentra prohibido el acceso al público en dos de las principales salas, donde las estelas y murales, sobrerrelieves y carátides se encuentran dispuestos para la observación de un selecto «target» privilegiado. Me preguntarán entonces cómo conseguí fotografiar todo eso. Bueno, ya me conocen.

En Puma Punku. Obsérvese el perfecto pulido de la piedra y el milimétrico tallado de los desniveles
En Puma Punku. Obsérvese el perfecto pulido de la piedra y el milimétrico tallado de los desniveles
Muro frontal del Kalassasaya
Muro frontal del Kalassasaya
Acceso al Kalassasaya
Acceso al Kalassasaya

Muro lateral del Kalassasaya
Muro lateral del Kalassasaya

Muro trasero del Kalassasaya
Muro trasero del Kalassasaya

La complejidad y variedad de certezas y presunciones que genera Tiwanaku no pueden ser agotadas aquí, y será motivo de próximas entradas. Sirva entonces esta breve reseña como una «puesta en ambiente» del lector para trascender la explicación simplista y siempre discriminatoria de la mayoría de los estudiosos del lugar, y un homenaje a los contemporáneos como Antonio Portugal o los ya desaparecidos como Posnansky, por su coraje y visión preclara.

Monolito Ponce
Monolito Ponce

Monolito Bennet
Monolito Bennet

¿Cómo no conmoverse ante el «megáfono», por ejemplo?. En el Kalassasaya, una inusual perforación en un muro permite ubicarse de un lado y, del otro, escuchar las palabras reververantes que se emitan muy amplificadas. Los fisiólogos han señalado que la estructura de la perforación reproduce todas las características del oído interno humano, lo que, cuando menos, habla a las claras del conocimiento cierto de la anatomía que tenían sus constructores.

Una vista del "megáfono"
Una vista del "megáfono"
Una estela con remembranzas egipcíacas...
Una estela con remembranzas egipcíacas...
Friso con "chakanas"
Friso con "chakanas"
Gustavo y Antonio, durante una pausa para almorzar
Gustavo y Antonio, durante una pausa para almorzar
Otra "puerta" caída
Otra "puerta" caída
Vista de la Akapana
Vista de la Akapana
Vista desde un ángulo del Kalassasaya
Vista desde un ángulo del Kalassasaya

Vea más fotos en la galería de Gustavo Fernández en Flickr

40 comentarios de “EL PORTAL DIMENSIONAL DE TIWANAKU

  1. Josep dice:

    Amigo Gustavo, otra vez muchísimas gracias por tu artículo -y los que vendrán, que el tema lo merece-. Me entran ganas de ir al Titicaca, construirme una islita de totora y quedarme a vivir allí.
    Comparto plenamente tu impresión de que Tiwanaku es una «maquinaria» -desmontada, expoliada, mal reconstruída, con «todo puesto en el lugar equivocado»…
    Estoy disfrutando de tus fotos en Flikr. Todas me llaman poderosamente la atención, pero quiero preguntarte por una (la «Puerta» caída en Puma Punku): http://www.flickr.com/photos/27825548@N07/4719428561/sizes/l/
    En la rotura del primer plano se aprecia un grabado; si fuera un grafiti lo habrían hecho sobre la superficie pulimentada, no en la irregular de la rotura. ¿Que impresión te dió sobre el terreno? Viéndolo en foto, imagino que las «puertas» pudieron ser construídas artificialmente, como nuestro hormigón. Se rompió precisamente por el punto mas débil, por la piedra grabada que tenía dentro…
    Hablabas de los «cientificistas». Lo que me interesan son los sentimientos que despierta el «portal dimensional», meditaciones, resultados con el péndulo… Y en el otro extremo, me gustaría tener la opinión de picapedreros, canteros, profesionales con experiencia trabajando la roca. Que dijeran como se hicieron los taladros, los ángulos rectos, el pulido de la piedra; pero no «ex cátedra», como los academicistas, sino viendo las huellas que han dejado los escultores.
    Como ejemplo que no tiene nada que ver con Tiwanaku, el picapedrero que esculpía las lápidas del cementerio de mi pueblo se reía de los prehistoriadores, con lo de las «distintas» fases de piedra tallada y piedra pulimentada. Por su trabajo sabía que la piedra tallada corta, y la pulimentada no. Que no representaban distintos grados de evolución, sino de uso. Cuando querían cortar, usaban herramientas talladas. Y si lo que querían eran instrumentos ceremoniales -o juguetes-, los pulimentaban para evitar accidentes. Desde su experiencia práctica, desafiaba a cualquier «profesor» a que despellejara un jabalí con herramientas de piedra pulimentada.
    Pienso que este tipo de experiencia práctica con el trabajo de la piedra sería muy interesante en Tiwanaku (y en Samaipata, y en México, Egipto o Nan Madol…)
    Gracias otra vez, y ya estoy esperando el siguiente blog, la siguiente revista, a ver también que nos cuentas de tu viaje en el podcast…

    • Gustavo Fernández dice:

      Hola querido amigo mío:
      como siempre, gracias por tus palabras y tus reflexiones, siempre constructivas, siempre sumatorias.
      Vamos por partes, como dijera nuestro buen amigo Jack The Ripper. Respecto al grabado en la superficie rota, mi opinión en el terreno es que primero, en algún momento remoto se quebró la piedra y muchos siglos después los incas tallaron el grabado que reproduce, por otra parte, un motivo típicamente incaico.
      En cuanto a la opinión de picapedreros, en la zona no tengo ninguna, pero te imaginarás la sonrisa entre cansina y comprensiva de los aymaras cuando les vienen con las explicaciones académicas… tienen un humor extremadamente sutil. Por ejemplo, donde se superponen, por caso, construcciones españolas -perdón por lo que sigue respecto a tus antepasados- a las incaicas, explican a los turistas que las segundas las hicieron los incas, y las primeras, los inca…paces.
      Acotación al margen: conozco varios «panrrefutadores militantes» (de Tiwanaku también) que hilan sesudas teorías… pero no han pisado nunca el lugar. Sin parecer pedante, es el tipo de situación en la que me encojo de hombros y musito: «yo estuve allí».
      Saludos y «chapeau» al picapedrero de tu pueblo: un genio el amigo.
      Abrazo

  2. Damian dice:

    Gracias, Gustavo. Excelente. Me produce mucha angustia eso de «sólo se ha excavado el 5% del lugar». Creo que eso se aplica a la mayoría de los sitios sagrados de estas culturas. Ni qué hablar de Samaipata (sin duda rival de Machu Pichu si estuviese expuesta a la superficie en todo su esplendor). ¿Qué piensa la gente del lugar? ¿Vislumbran algún cambio a esta situación política/social/cultural/económica/etc que ha estancado las excavaciones? De hecho ¿están las excavaciones estancadas completamente o existen proyectos?

    Abrazo,

    Damián.

    PD: tengo una anécdota sobre Samaipata que mejor la cuento en la lista (pucha que se me acumulan cosas).

    • Gustavo Fernández dice:

      Hola Damián:
      Te propongo ver las cosas de otra manera (respecto a ese 5 %): a mí me produce entusiasmo y expectativa, por lo que puede aparecer. No olvides aque en buena medida el lugar fue expoliado y destruido precisamente por estar expuesto, primero con el material que los conquistadores «reciclaron» en otras construcciones, después por los «huaqueros» en busca de tesoros, finalmente por los turistas y curiosos que se llevaron a casa elementos minapreciables como «souvenir». Así que el hecho que tanto esté aún bajo tierra es garantía de preservación.
      Y avanzan, claro que a ritmo del Altiplano. Actualmente se está despejando la pirámide de Puma Punku, aunque con sólo mirar en los alrededores uno intuye, bajo los montículos, otras maravillas.
      Espero conocer pronto la anécdota. Abrazo

  3. Damian dice:

    Sí, es verdad. Viéndolo de esa forma es tener la seguridad de que estamos contemplando la punta del iceberg. Pero no deja de angustiarme pensar que quizá todo quede sepultado por muchas generaciones más. Así que para contrarrestar tanto pesimismo, pensemos en la importancia de mantener el entusiasmo a lo largo de esas generaciones, hasta que el momento llegue. Siga por ese camino, amigo, que va muy bien.

  4. esoterimo dice:

    Queria invitarte a formar parte de mi nuevo directorio esoterico : http://directorio-esoterico.blogspot.com/
    Es para paginas de esoterismo y cosas paranormales en general.
    Alli escribo una reseña de la pagina esoterica ademas de poner un par de enlaces hacia el.
    Sea como sea espero que pases un buena dia
    Saludos
    Erika 🙂 Por si quieres escribirme mi mail es ebize@tarotleo.com
    Pd: Vistita tambien mis paginas Tarot : http://www.tarotleo.com/
    Y mi blog de Horoscopo del Amor: http://www.horoscoposamor.com/

  5. Josep dice:

    Hola Gustavo. Cuanto mas veo tus fotos, mas preguntas me hago. Por ejemplo, respecto a la «Rueda de molino con jamba», yo pensaba que las ruedas de molino eran de la cultura del trigo, no de la del maíz. Resulta que mis antepasados no eran solo «inca-paces» en construcción, sino también en artes culinarias. Aplicaron al maíz las técnicas de molido del trigo, con el resultado de «epidemias» de pelagra, y que ahora el maíz haya quedado (en Europa) prácticamente como pienso para el ganado, o un uso muy restringido en repostería o para alérgicos al gluten.
    Tardé en contestarte, entre otras cosas, porque había olvidado la palabreja «nixtamalización»; ahora que la he encontrado, buscándola en Wikipedia me ha aparecido también el «metate», que en nada se parece a las «ruedas de molino». A parte de la de tu foto, ¿han aparecido otras «piedras de molino» prehispánicas?.
    Otra cosa. Respecto al 5% excavado, André Malby, un esoterista que había vivido por estos lugares, decía por el año 90, refiriéndose a la espiritualidad, que los Andes son «un muerto muy bien conservado», y que cuando resucite…
    En otro programa radiofónico del año 91, «Ovnis y Fenomenología Paranormal», Andreas Faber Kaiser se saltó las normas del programa, interrogando a un tal «Jesús de Mataró» o «Jofre» sobre unas experiéncias que tuvo en el Lago Titicaca y en el Valle Sagrado de Urubamba, el año 82 ó 83, cuando estaba en un «viaje de investigación» con Anselm Pi (el que entrevistó Débora en: http://cronicasubterranea.blogspot.com/2010/04/anselm-pi-rambla-tuneles-subterraneos.html). Resulta que mantuvieron contacto con un grupo que decía pertenecer a la antiquísima «Universidad Monástica de Moravia», que estaban realizando una «cura de transmutación para no morir» que duraba 12 años. Les dirigía una «maestra trascendida», Nekim, con poderes para hacerles revivir vidas anteriores, y que parece ser que provenía del Mundo Subterráneo ¿Shamballah? El año 90, «Jofre» afirma que se han ido cumpliendo las «afirmaciones» de Nekim sobre su futuro.
    El fragmento de Sintonía Alfa que habla de Nekim está en catalán, pero lo he cortado y subido a Wuala pensando en la amiga Leonor: http://www.wuala.com/josep/Music/Nekim-Universidad%20monastica%20de%20Moravia.mp3
    Un abrazo

    • Gustavo Fernández dice:

      Hola compañerto de camino. Siempre resulta estimulante leerte, porque ayudas a enfocar otros derroteros. Gracias por eso!.
      Respecto a la «rueda de molino», a mí me galvanizó porque, precisamente, el sistema de molienda rotatoria es europeo, no americano. Así que creo que otro era su uso. Además la jamba tiene que haber servido para darle firmeza a algún ajuste que, precisamente, impediría todo movimiento rotatorio. Ten presentes las otras numerosas jambas de bronce que eran empleadas para articular bloques enormes entre sí con el fin de darle mayor estabilidad antisísmica. Dicho de otro modo: si la «rueda» tenía jamba, era para fijarla inmóvil y por ende, no rueda la rueda 🙂
      Pero esta reflexión vino después. El punto es que recordé otra «ruda de molino». Ver «Al Filo de la Realidad nº 24», mi artículo «Extraterrestres en Misiones». De todos modos, volveré sobre esto (y otros puntos) en inminentes entradas al blog.
      Abrazote.

  6. Josep dice:

    Hola otra vez, amigo Gustavo. Vivo en lo que era tierra de molinos harineros accionados por agua; la mayoría están, o abandonados, o reconvertidos en residencias de verano, con las antíguas ruedas ya sólo de adorno.
    Me he estado enterando de como funcionaban: había una rueda fija, y encima se situaba la que giraba con la fuerza del agua. El grano se iba introduciendo por el agujero central, y la rueda superior lo trituraba. Al mismo tiempo, gracias a las estrías que tenía grabadas, iba empujando la harina hacia el borde. La piedra se iba gastando; varias veces a lo largo de su vida había que volver a grabar las estrías. Las que se ven por aquí de adorno son las que deshechaban por demasiado gastadas. Para poder comparar las estrías con la del museo de Misiones, aquí hay una que conserva bién el grabado: http://2.bp.blogspot.com/_fLJ-cXqyYjo/SVUVO9Ijq1I/AAAAAAAAB-o/ICRlSDBgvQ4/s1600-h/DSC01344.JPG
    Aunque ésta es de Holanda, probablemente de un molino de viento. Pienso que si la rueda de Tiwanaku realmente se usó (o se reutilizó) en un molino de grano, sería la inferior, la fija.
    En cuanto a lo que te dijo el encargado del museo de Misiones, de la piedra en posición vertical movida por caballos, es una tecnología totalmente distinta, y las piedras no se parecen en nada. Aquí puedes ver un molino de aceite con las ruedas «verticales»: http://www.elcardener.com/images/150.jpg
    Como todavía está en funcionamiento, se han substituído los asnos por tracción mecánica.
    Lo que encuentro muy fuerte, es que el campo residual de la piedra de Misiones alterara el funcionamiento de tu reloj digital y de tu cámara fotográfica. Si es realmente por campos magnéticos procedentes de la rueda, creo indispensable repetir la visita al museo con una cajita llena de limaduras de hierro (de cualquier taller mecánico), y tirarlas cerca de la rueda cuando el encargado no esté mirando… Si las atrae y quedan pegadas en la vitrina, tendremos el dibujo del campo magnético, y nos ahorramos el magnetómetro.
    Y si a la distancia en que altera el funcionamiento del reloj no se produce ningún efecto en las limaduras de hierro, tendremos un Descubrimiento con mayúsculas.
    Un abrazo y perdona el latazo.

    • Gustavo Fernández dice:

      Ninguna lata, amigo mío. Excelente material.
      En diciembre, andré por Misiones y tengo las mejores intenciones de darme una vuelta por el museo. Llevaré las limaduras. Si todo sale bien, unos días después comentaré el resultado, para éxito o fracaso. Y si todo no sale tan bien, por seis meses no tendrán noticias mías, que es la pena que el Código Penal contempla para quien sea pescado «in fraganti» atentando contra patrimonios culturales 🙂
      Abrazo

    • Gustavo Fernández dice:

      yo de nuevo, Josep…..
      Me quedé pensando esto. Supongamos que la «rueda» que origina este debate, la que presenta el surco para la «jamba», fuera la rueda fija -por eso, el anclaje- de un molino. El punto es que no sólo cuando llegaron los españoles al lugar nunca volvieron a emplear este sistema de fijación, sino que, de hecho, tampoco los aymaras que tardiamente ocuparon las ruinas de Tiwanaku. Me pregunto si es posible que civilizaciones tan distantes no sólo en el tiempo sino en su idiosincrasia, como los españoles tardíos y los originarios tiwanakanos, emplearan exactamente el mismo sistema para molienda…. no sé, es una pregunta. Saluditos

  7. Josep dice:

    No te preocupes, ya te enviaremos mate a la cárcel de Misiones.
    En serio, no se trata de lanzar limaduras de hierro contra el disco; una vez estés cerca y te fallen el reloj digital y la máquina de fotografiar, dejas caer unas limaduras de hierro: si el disco emana un fuerte campo magnético, debe atraerlas como un imán, y señalarán los puntos de donde procede el campo. Si en cambio caen hasta el suelo, sólo te arriesgas a una bronca de la mujer de la limpieza. También se puede comprobar la presencia de magnetismo con una brújula.
    Y no te olvides el péndulo, pues si de la piedra emana algo que altera el funcionamiento del reloj digital y no es un muy fuerte magnetismo, mejor irle preguntando al péndulo…
    Trabajé muchos años entre relés y pequeños transformadores. Como curiosidad, tenía que cambiar a menudo las tarjetas de crédito, pues se alteraba la banda magnética; en cambio, nunca me fallaron el reloj digital ni la calculadora.
    No sé si alguno recuerda las computadoras de los años 70, con su memoria de toros de ferrita, impresoras de agujas o de bola… Pero todos estos campos magnéticos no llegaban a influir en los caprichosos transistores de germanio que se usaban entonces.
    Por eso pienso que la rueda de Misiones, que hace fallar modernos relojes digitales y cámaras fotográficas, nos está diciendo que tiene algo muy digno de estudio.
    ¿No tendrá algo que ver con la piedra Chintamani?

  8. Josep dice:

    No había visto tu pregunta de la rueda de Tiwanaku.
    No, no pienso que los tiwanakanos usaran el mismo sistema para molienda de ¿maiz? ¿quinoa? que los españoles para el trigo y la cebada.
    Lo que si creo posible es que los españoles reutilizaran la rueda de piedra para su harina.
    Pero la pregunta del millón: ¿Para qué la usaban sus escultores tiwanakanos?
    ¿No generará también efectos electromagnéticos curiosos? A pesar de la distancia, ¿no formaría parte, con la de Misiones, de otra serie de «discos Dropa» andinos?

    • Gustavo Fernández dice:

      Ese es el punto, quizás los españoles tomaron -como hicieron con tantos otros elementos- el bloque circular preexistente y lo reconvirtieron en rueda de molino, pero no se me ocurre para qué lo habrán empleado sus constructores originarios. Va de suyo que la misma forma circular no lo hace muy apto para suponerle parte de una edificación, salvo, quizás, como capital de alguna columna que, por otra parte, no se han hallado. En fin, este mi primer viaje al lugar es como una inspección ocular panorámica; demasiadas preguntas para enfocarse en algunas de ellas. Quedará para el próximo.
      Abrazo

  9. Josep dice:

    Recordaba haber visto piedras circulares con perforación central ¡que no atraviesa todo el grosor de la rueda!, que se usaban como «puertas», no como ruedas de molino: http://chopsueyblog.files.wordpress.com/2008/05/p6473derinkuyu.jpg
    Están un poco lejos de Tiwanaku, en Capadocia, y se usaban para cerrar entradas a niveles de las ciudades subterráneas. En la fotografía de Flickr no aprecio bien el tamaño, pero, ¿podría haber sido también puerta a algún pasadizo subterráneo?
    Como dices, quedará para el próximo viaje.
    Un abrazo.

  10. Veronica dice:

    Saludos Gustavo ,
    Muy interesante lo que escribes, bueno soy de Bolivia pero de la parte oriental y en septiembre tendré la oportunidad de por fin conocer Tiwanaku, y con tus fotos y comentarias tengo más ganas de ir de una vez.

    • Gustavo Fernández dice:

      Me alegro, Vero, que este modesto trabajo te haya motivado. Cuenta conmigo si hay algún dato más que pueda facilitarte! (yo regreso, de todos modos, creo que en octubre). Y entre nosotros, Vero, ¿¿¿¿¿estás allí y no has ido???? Dios le da pan….. jajajaja!!!!!!
      Beso

  11. Douglas dice:

    Hola Gustavo,
    me a encantado el articulo sobre tiwanaku, sobre todo despues de volver fascinado de este maravilloso lugar.
    Hace un mes fuí de visita a Bolivia, con ganas de ver lo más interesante( tiwanaku, titicaca, etc), y me lleve una gran impresión.
    Gracias a que mi abuela sabe hablar aymara, pudimos escuchar esas anécdotas que le dan a uno ganas de coger una pala y ponerse a excavar.

    Espero que dentro de poco tengamos mas noticias si vuelves a ir para enterarnos un poco más de lo que dicen ser la ciudad mas antigua del mundo, no?
    PD:una cosa que nos dijo el guardia sobre el monolito Bennet, esque por las noches se escucha una multitud de gente alrededor, y que a ellos les da miedo escuchar eso.

    Saludos.

    • Gustavo Fernández dice:

      Hola amigo: gracias por compartir tus vivencias. Con respecto al Bennet, se comentan toda una sucesión de «eventos paranormales» asociados, por ejemplo, la alta tasa de accidentes, suicidios, homicidios, que hubo en el parque al que se trasladó por casi 20 años por orden de un pasado gobernante, y que cesaron cuando fue restituido a Tiwanaku -operación en la que tuvo mucha participación responsable nuestro amigo Antonio Portugal- Estoy preparándome para regresar en diciembre, y lo comentaré en este blog. Si en alguna ocasión volvés por Bolivia, trata de visitar Samaipata: no quedarás defraudado.
      Un abrazo

  12. SILVIA dice:

    yo estuve alli…..y mi percepción desde lo más profundo de mi ser fue: DOLOR-DESOLACIÓN-DESESPERACIÓN, INTERROGANTES, DESPDIDA…..EN DEFINITIVA…» TODO UN MISTERIO»……COMO SI LOS GRANDES CONSTRUCTRES DE ESASMOLES GIGANTES SE FUERON DE ESE LUGAR MUY DE PRISA…
    FUÉ DISTINTA LA SENSACION QUE SENTI EN EL MACHU PICCHU ( EN 2 OPORTUNIDADES)…ALLÁ SE PERCIBÍA MUCHA LUZ….SENSACIÓN DE VIDA!!

  13. ronald dice:

    Gustavo no tengo palabras para expresar todo las sensaciones que me produce leer o ver acerca de tiwanaku siento una poderosa melancolia como si ubiese sido parte de ello en el pasado,lo mismo me ocurre con las civilizaciones es impresionante todo me dan ,vi muchos muchos documentales lei algo respecto a ello y sin ser un gran arqueologo o algo asi estoy seguro que que mi logica sentimental me lleva a esatr mas cerca de esas culturas que muchos que han estado ahi otra vez un gran placer conocerte y porfavor escribeme algo si, me gustaria una orientacion acerca del monolito benet ya que aparente un misterio algo caprichosamente esquivo gracias

    • Gustavo Fernández dice:

      Aquí vuelvo contigo: en este blog tienes un artículo dedicado exclusivamente al Bennet. Y creo que tu «lógica sentimental» (como creo que estás llamando a tu intuición) te está guiando en el camino correcto. Ánimo!.
      Un abrazo

  14. ronald dice:

    bueno gustavo cual es tu opinion acerca de las chakanas y de la maravillosa puerta del sol que muchos años lei en una revista donde se narrava una historia con dibujos de 3 niños donde uno de ellos indicaba que la puerta del sol era una entrada a otra dimencion y cuando ellos estaban por cruzar en la revista decia continuara , y la siguiente edicion de esa revista nunca la tuve estoy seguro quer salio pero no la tuve ubiese genial saber que pasaba bueno ahora con la internet se habla de eso , me gustaria saber que piensas y que sabes de ello,que puedes yo estoy seguro que es verdad,gracias

    • Gustavo Fernández dice:

      Hola amigo. Estoy convencido que las chakanas, obviamente existen y son túneles a reservorios de sabiduría ancestral. En cuanto a la Puerta del Sol, sólo sé que ni siquiera está en el lugar correcto, con lo cual, si te muestran un tornillo, será difícil que supieras exactamente qué funcvòn (además de ajustar algo) cumpliría en una maquinaria si no tuvieras parte de ella a la vista. Arriesgando mucho, tuve la sensación que el conjunto (no sólo la puerta, que sería apenas un «engranaje») es una gran máquina, quizás, para manifestaciones hiperdimensionales.
      Un abrazo.

  15. R2itos dice:

    Yo estoy 95% seguro que civilización humana empezó en las Ame ricas. Hace 40 años atrás una fuente (plato) con escritos Sumarios y otra lenguaje fue encontrado con símbolos Tiwanakonse en el altiplanicie Boliviano; Según a la educción moderna; los Sumarios fueron los pioneros de La civilization; solamente hay dos probilitades lógicas que puede responder a este «objeto fuera de era»
    1: Que los Sumarios compartia el terreno altiplano con otra cultura sofisticada o mejor que la civilización Sumaria.
    2: O el origen de los Sumarios son Americanos.
    Imagen
    http://akorra.com/wp-content/uploads/2010/04/Fuente-Magna.jpg

    Tengo un colección de evidencias que pueden probar que Las Americas es la cuna de la civilización humana.

  16. Dra. Vivian Lunny dice:

    Hola Gustavo, gracias por despertar mis recuerdos y mi nostagia, y recuerdos muy bellos de “mi querida patria Bolivia” a la que fui por ultima vez hace 10 años, ahora vivo en Vancouver, en el Canada pero siempre recuerdo y añoro mis tiempos, como dice la cancion “te acordas hermano que tiempos aquellos…..”

    Mi primera visita a Tiwanaku fue en 19659 en una excursión con mi curso en la escuela primaria, me impresiono tanto qhe en 1963 durante las vacaciones finales trabaje como guia de turismo llevando gente desde LaPaz a Tiwanaku y al lago y sus islas, en ese entonces decidi que para hacer un buen trabajo deberia estudiar un diplomado en turismo, que incorporaba arqueologia y folklore regional.

    Mi profesor de Arqueologia fue el Arquitecto Ponce Sanjines, en cuyo honor se llamo a uno de los monolitos en tu Post.

    Lo que parece ser cierto relacionado con Tiwanaku es que era parte del continente de Mu, Lemuria, asi como tambien de la Atlantida.

    Habiendo pasado mi niñez y mi juventud alli no me queda la menor duda de las raices de la cultura autoctona y de lo afortunada que fui estudiando medicina en la dualidad de la medicina occidental y la medicina tradicional regional.
    Un abrazo de
    Vivian

  17. gerardo dice:

    gracias por tan lindas fotos y la narración de primera – mientras leía y miraba las fotos me ha pasado algo muy extraño – fue algo así como transportarme a esos lugares en un abrir y cerrar de ojos- aún me late fuerte el corazón.
    saludos a josep.
    un abrazo.

  18. nataniel dice:

    Hola gustavo ,soy un estudioso de las culturas antiguas y me gustaria saber si astronomica y/o geodesicamente existe alguna relacion entre los monumentos tiwanakotas con los de centro america y egipto? por otra parte arquitectos modernos no salen de su asombro al ver la perfeccion del corte de las piedras casi como si hubieran usado el laser como instrumento de corte que opinas?
    gracias y por favosigue adelante.

  19. nataniel dice:

    hola gustavo como estás, una de las peculiaridades de tiwanaku es que no existen las formas redondas o circulares, por qué?
    que piensas de esto? La historia oficial dice que los tiwnakotas no conocian la rueda, ´cual tu opinion?
    gracias un abrazo.

  20. Manuel Castagnola dice:

    Es maravilloso pero la realidad es otra e publicado una narrativa en Ed. Bubok el nombre es 06-2010 INCAS El secreto oculto. habla sobre el secreto del Imperio Incaico.

  21. Raul Manuel Castagnola Migone dice:

    MIS QUERIDOS AMIGOS VEO QUE LA CULTURA PERUANA AUN CONTINUA PORQUE DESGRACIADAMENTE MI PAIS ESTA DIRIGIDO POR ANIMALES COMO EL MINISTRO DE CULTURA QUE ES UN HIJO DE SU MADRE QUE SOLO SE PREOCUPA EN DEJARLO SEGUIR Y CERRAR LOS OJOS A LOS GRANDES LADRONES QUE SE ESTAN LLEVANDO TODO AL EXTRANJERO Y EL COLMO QUE AVECES LO PASAN POR EL AEROPUERTO PRINCIPAL Y SI LA POLICIA INTERVIENE ESA PERSONA LLAMA POR TELEFONO Y AL FINAL LO DEJAN PASAR. ESA ES LA GENTE QUE GOBIERNA MI PAIS.

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